¿Podría ser el fin de las polémicas “mañaneras” de AMLO?

En el inicio de la presente administración del Gobierno Federal, el presidente Andrés Manuel López Obrador comenzó sus ya habituales conferencias matutinas. Este espacio se presentó como un ejercicio de rendición de cuentas y el enlace informativo con los mexicanos. Más allá de cumplir con este cometido, se han convertido en presentaciones rodeadas de polémica a las que se ha propuesto actualmente ponerles fin. ¿Es esto posible?

Desde su primera emisión, el 3 de diciembre del 2018, las mañaneras han estado rodeadas de controversia por distintos motivos, uno de los principales es la polarización a la que, acusan, incita AMLO. En más de una ocasión López Obrador se ha encargado de señalar, criticar y descalificar a quienes lo cuestionan, entiéndase políticos opositores, Poder Judicial o medios de comunicación, que investigan violaciones a derechos humanos o casos de corrupción durante su sexenio.

Particularmente, las mañaneras han tenido a diferentes personajes de la política y el periodismo que se han pronunciado en contra de los dichos del presidente o buscan explicaciones sobre asuntos en investigación. Entre ellos están Jorge Ramos y Nayeli Roldán, periodistas que pedían respuestas por las cifras de homicidios y el espionaje perpetrado por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), y hasta a politólogos como Denise Dresser.

Esta última anunció en el periódico “Reforma” que ha emprendido acciones legales contra el presidente por los dichos en contra suya. La analista acusó que desde las mañaneras se le ha difamado, por lo que interpuso una demanda ante el Poder Judicial de la Federación.

Dresser abundó que también hay violaciones a los derechos de otros actores, como la ministra presidenta de la Suprema Corte de la Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, además de que ataca al INE y defiende a la ministra Yasmín Esquivel por sus escándalos sobre plagios. En su comunicado reafirma que “atrás quedó la promesa de diálogo circular y rendición de cuentas. En su lugar presenciamos un ejercicio cotidiano de degradación”.

Recientemente Dresser fue, nuevamente, blanco de señalamientos por parte de López Obrador, esto después de que mencionara en entrevista para “Aristegui Noticias” que las conferencias mañaneras deberían suspenderse. El argumento de la politóloga fue que, desde ellas, el presidente causa polarización y que, si bien antes ya había fragmentaciones sociales, es él quien las acentúa y crea más adversidades entre los mexicanos.

En respuesta, el titular del ejecutivo publicó un video en sus redes sociales desde sus vacaciones en Palenque. En él declaró que los son los conservadores quienes quieren prohibir sus conferencias matutinas porque “son intolerantes y nada más quieren hablar ellos, no quieren que hablemos todos”. Finalizó aseverando que esto no sucedería y que seguiría adelante con el espacio.

Después de estas y otras polémicas, surge la interrogante sobre si es viable la suspensión de las conferencias del presidente. Las mañaneras, aunque no puedan ser retiradas totalmente por suponer actos de censura, sí hay momentos en los que deben pausarse o retirarse si ya se han emitido. Uno de los escenarios más destacados fue en los comicios de hace dos años.

En 2021 el entonces consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, instó a que la transmisión completa de las mañaneras debería suspenderse mientras duraran las campañas electorales de ese año. En total se debía abarcar del 4 de abril al 2 de junio. Córdova sostuvo que, dado que en las mañaneras se exhiben programas y logros gubernamentales, su presencia durante la veda electoral era una violación a la ley.

Bajo esta vertiente, el artículo 41 de la Constitución Mexicana establece que, desde el inicio de las campañas electorales no se pueden transmitir mensajes gubernamentales, salvo contadas excepciones enunciadas por la Carta Magna.

En el mismo sentido, el artículo 134 dicta que la disposición de los recursos de la federación se debe emplear con imparcialidad, acto que no sucede en las mañaneras, toda vez que son un espacio de difusión principalmente para el presidente y sus partidarios, donde incluso se niega el derecho de réplica a opositores como el caso de la senadora Xóchitl Gálvez, quien en reiteradas ocasiones ha solicitado el permiso de hacerse presente, siempre con respuesta negativa.

Otra vertiente a considerar en cuanto al retiro de las conferencias que ya se emitieron se dio el 27 de marzo. AMLO hizo el llamado a no votar por los bloques contrarios a Morena en los comicios que se celebrarán en Coahuila y el Estado de México este año. Ante ello, la Comisión de Quejas y Denuncias del INE ordenó la retirada de la conferencia de dicha fecha, esto por violar el principio de equidad en los procesos electorales.