El Mundial de Futbol Sub-17 es una de las ventanas en las que los jóvenes talentos de 24 países demuestran sus capacidades. Este año la batuta de organizar el torneo le correspondía a Perú; no obstante, la FIFA anunció que le retiraba la sede al país sudamericano por falta de infraestructura deportiva.
Estas competencias son llamativas porque en ellas se empiezan a mostrar a las futuras estrellas del futbol mundial. A pesar de ser una copa menor, también se requieren ciertas certificaciones para llevarla cabo, al igual que con la justa que tiene lugar cada cuatro años, cuyos criterios son aún más exigentes.
Los países interesados en recibir una justa mundialista deberán presentar su candidatura ante la FIFA, en la que enlistarán el cumplimiento de los requisitos.
En cuanto a lo deportivo, los estadios que sean seleccionados estarán apegados a tener una capacidad, como mínimo, de 40,000 personas para la fase de grupos, de 8 a 10 recintos en total. En consiguiente, para las rondas de eliminación directa, el aforo ascenderá a 60,000, mientras que para la final incrementará a 80,000. Las canchas en cada caso tienen que medir 105 metros a lo largo, por 68 metros de anchura.
ATENCIÓN! La FIFA retiró a Perú ???????? como sede del Mundial sub-17 (se jugará este año a partir del 10/11) por "la incapacidad del país para cumplir con sus compromisos y terminar las infraestructuras necesarias para disputar el torneo". Más adelante se definirá al nuevo anfitrión. pic.twitter.com/POisz26dXn
— VarskySports (@VarskySports) April 3, 2023
Del mismo modo, es necesario que tengan la categoría de cuatro estrellas por adecuaciones de seguridad o disposiciones del terreno de juego. En las gradas, cada asiento tendrá dimensiones de 47 centímetros de largo y ancho, más 30 de altura en los respaldos. Son importante los espacios para personas con capacidades diferentes, incluyendo rampas o elevadores para sillas de ruedas y baños adecuados.
Si hay techo, este permitirá la entrada de luz solar y sistemas de filtración y drenaje para la lluvia. Las vallas publicitarias no deben superar el metro de altura para evitar que obstaculicen la vista del público y las pantallas gigantes mostrarán las imágenes del partido a la par de un reloj que exhiba el tiempo transcurrido de juego. Finalmente, un mes antes del primer partido no habrá ninguna clase de evento que pueda comprometer el césped o el graderío. En caso de querer colocar pasto artificial, la FIFA será quien lo apruebe.
Para el entrenamiento de los equipos, los centros deportivos serán de uso exclusivo de cada selección días antes de cada partido y no se alejarán a más de 40 kilómetros entre los campos de juego y los hoteles de concentración. También se exigen estacionamientos cercanos al público para 5,000 plazas.
Si bien los equipos de futbol, como entes privados, suelen hacer este tipo de inversiones para sus actividades cotidianas, en muchos países que se postulan, los estadios no tienen estas capacidades al momento, por lo que se tienen que llevar a cabo remodelaciones o edificaciones completas.
Respecto a lo urbano, la FIFA pide que se cuente, al menos, con tres hoteles de 5 estrellas para los turistas que arriben a cada ciudad. La lejanía con los estadios no debe superar los 40 km. En la misma línea, a los alrededores tienen que estar cerca servicios de salud, seguridad y medios de comunicación.
La movilidad es otra vertiente, pues en cada ciudad debe haber conexión ferroviaria y vialidades directas que conecten estadios, hoteles, centros de medios y otras ciudades.
Pese a que se tienen que cumplir con las imposiciones de la FIFA, no es estrictamente necesario que se tengan los estadios o vialidades urbanas para que se otorgue la sede, pero deben concretarse antes de que inicie el torneo. El caso más reciente es lo sucedido con Catar en 2022, puesto que no tenían ninguna cancha en regla y en algunas localidades ni siquiera existía ciudad en los años previos.
Después de que Perú ya hubiera albergado este campeonato sub-17 en 2005, cuando México levantó el trofeo, intentó repetir el acto en 2019, pero su postulación fue negada por la FIFA por situaciones similares, al no cumplir con los requisitos completos, y pasó la estafeta a Brasil.
Este año se dio el mismo caso, aunque aún no se da a conocer que país será el que ocupe el lugar que se le retiró a los peruanos.
De acuerdo con el reglamento del órgano rector del balompié, para la categoría menor se llevan a cabo visitas los años previos para inspeccionar el estado de los estadios en materia de seguridad y calidad de infraestructura. Las capacidades para público no son relevantes, pues en su reglamento no hacen especificaciones en este rubro. Si las determinaciones dictan que no son convincentes, se rechazará de manera definitiva. Además, se deben presentar acreditaciones de instancias gubernamentales que den cuenta de que los estadios cumplen con las normas antes citadas.
En cuanto a los rectángulos de juego, se harán reconocimientos para cerciorarse de que tienen las medidas reglamentarias, siendo estas de 105 de largo por 68 de ancho. Los campos de entrenamiento pueden ser distintos, de 100 por 64 y serán de uso exclusivo días antes de cada partido y no estarán a más de 20 minutos de lejanía a cada estadio.