Cine de superhéroes, la debacle del subgénero más exitoso de los últimos años

En el 2008, el mundo vio la primera película en solitario de Iron Man, dirigida por John Favreau y protagonizada por Robert Downey Jr. Posteriormente, Marvel, de la mano de Disney, logró erigirse como una franquicia de entretenimiento que, en década y media, dominó el cine a placer, instaurando sus producciones en las salas de todo el mundo y alcanzando récords de taquilla con muchas de ellas.

Película tras película, el Universo Cinematográfico de Marvel (UCM) se consagró como un modelo de negocio que fue replicado, sin el mismo éxito, por otras empresas del rubro como DC Cómics con Warner Bros. La creación de mundos compartidos de superhéroes dejó a estas productoras grandes ganancias, pero actualmente el contexto empieza a cambiar.

Después de años con esta dinámica, parece que los fanáticos comienzan a fatigarse de la sobreexplotación del género, toda vez que las últimas cintas, de ambas productoras, no recaudan en taquilla lo esperado por los ejecutivos.

Lo más reciente de los superhéroes, “¡Shazam! La furia de los dioses” y “Ant-Man and the Wasp: Quantumania”, no han logrado grandes números en taquilla y en este ámbito se requiere al menos el doble o triple de su presupuesto para declarar que hubo ganancias.

La película protagonizada por Scott Lang, interpretado por Paul Rudd, tuvo un presupuesto de hechura de 200 millones de dólares (mdd), más otros 100 para gastos de mercadotecnia. Se estrenó el 6 de febrero con 120 mdd en su primer fin de semana y, a día de hoy, “Ant-man” ha recaudado un aproximado de 469 millones en todo el mundo.

Si bien, la cifra ya está por encima de lo usado en su realización, a más de un mes de estreno se ha estancado en la consecución de los 600 millones necesarios para que haya rentabilidad total. El carisma y la simpatía del hombre hormiga no tuvieron el mismo impacto que sus dos primeras partes, que terminaron con 519 y 622 millones de dólares cada una por lo que quedaría como la menos aceptada de la trilogía.

Situación parecida está sucediendo con “¡Shazam!”, el héroe al que da vida Zachary Levi. Para elaborarla, Warner empleó aproximadamente 125 mdd, incluido el gasto de publicidad. Desde su estreno en salas el 16 de marzo, con un fin de semana inicial de apenas 30 millones, solo alcanzó la mitad de lo que la casa productora esperaba. En dos semanas de exhibición, la taquilla apenas supera el centenar de millones en todo el mundo.

En DC, el mayor fallo son los fracasos constantes en su intento por emular el universo que ha levantado su competidora. Desde la aparición de “Man of Steel”, en 2013, se pensó que el trabajo del director Zack Snyder daría a DC el salto de competitividad necesario para hacer frente a Disney. Pero fue todo lo contrario, Snyder acabó fuera de cualquier proyecto y los actores principales se han visto envueltos en polémicas, por lo que terminan abandonando sus roles o con poca claridad de sus futuras participaciones.

Ezra Miller fue arrestado en repetidas ocasiones por acoso, agresiones y alterar el orden público en Hawái. Ben Affleck, el Batman del universo, se ha separado del entorno y, entre rumores de su regreso o despedidas definitivas, no se sabe en qué momento volverá a caracterizar a Bruce Wayne. Con la llegada de James Gunn a DC, se creyó que habría una nueva oportunidad de reinventarse, pero una de las primeras noticias fue que Henry Cavill ya no se vestiría de Superman, pues buscan un enfoque más joven de Clark Kent.

Una de las nuevas incorporaciones, Dwayne Johnson, gustó en su papel de Black Adam, pero no triunfó con el público, puesto que su recaudación no pasó de los 392 mmd, contra los 260 usados para realizarla y promocionarla.

En sus mejores años, Marvel pudo colocar al menos cuatro películas entre las más taquilleras de la historia, siendo estas “Avengers: Endgame” (2019) con 2,797 millones de dólares, “Infinity War” (2018) juntando 2,048, “Spiderman: No way home” (2021) con 1,916, y “Avengers” (2012), que recolectó 1,518 millones. Sin embargo, un símil de estas es que son eventos grandes, donde se reúnen múltiples personajes o se trae de vuelta a quienes surgieron antes del auge de superhéroes, como el caso de Spiderman.

Lo que un día funcionó en la pantalla grande, ya sean historias poco conocidas como “Los Guardianes de la Galaxia” o las de origen, ya no es bien visto por la gente. “Black Widow” y “Los eternos” también fueron fracasos en taquilla que empezaron a marcar la debacle de Marvel.

El descontento no se expresa únicamente a la hora de comprar de boletos, pues al menos en el caso de Marvel, los trabajos más nuevos generan cantidad de críticas por la deficiencia en sus efectos especiales, incluyendo a “Ant-Man 3” y otras como “Thor, Love and Thunder”, “Dr Strange and the multiverse of madness” y “Black Widow”.

En estos 15 años, han dividido opiniones sobre la calidad cinematográfica de cada filme, pero en la mayoría de los casos bien aceptadas y con buenas críticas. Desde el final de los héroes más queridos, como Iron Man, Capital América o Hulk, lo siguiente ya no ilusiona a los marvelitas. Para los próximos años, la cartelera presentará “Secret Invasion”, “Echo”, “Guardianas de la Galaxia Vol. 3” y “The Marvels”. Mientras, DC seguirá con el intento de instaurarse como universo compartido con películas como “Aquaman 2”, “Mujer Maravilla 3”, y la varias veces retrasada “The Flash”.

Todas estas se han hecho con fórmulas ya conocidas, por lo que no convocan a los fans como antes, quienes empiezan a decantar por películas con tintes más oscuros como “The Batman”, “Joker” o “Deadpool”.