Hoy en día, las mujeres son protagonistas en el mundo deportivo inspirando a otras con su entrega, determinación y fortaleza. Derivado de esa situación, NotiPress realizó un recuento de las atletas que cambiaron la historia del deporte.
Katherine Switzer se convirtió en la primera mujer en correr un maratón el 19 de abril de 1967. Para lograrlo, la atleta nacida en Amberg, Alemania, se registró con sus siglas y no con el nombre completo, pues las mujeres tenían prohibido correr el maratón de Boston.
Sin embargo, el codirector de la maratón se percató de su presencia y utilizó la fuerza física para detenerla y expulsarla de la competencia. Tras ello, su entrenador, su pareja y otros corredores escoltaron a Switzer para que pudiera finalizar la carrera en 4 horas y 20 minutos. Gracias a Katherine Switzer, el comité organizador del maratón de Boston admitió oficialmente el registro de mujeres corredoras.
Betty Robinson fue la mujer más joven en ganar una medalla de oro en la historia moderna del atletismo durante los Juegos Olímpicos de Ámsterdam 1928. Su triunfo en los 100 metros marcó la pauta para las corredoras, pero su nombre no brilló por su medalla, sino por un acontecimiento que le cambió la vida.
Tres años después de su triunfo histórico, la atleta originaria de Riverdale, Illinois, Estados Unidos, estuvo involucrada en un accidente aéreo en Chicago. Supuestamente se encontró muerta entre los restos del avión; posteriormente fue colocada en la cajuela de un automóvil y llevada a una funeraria.
Al llegar, el personal del servicio funerario notó que no estaba muerta, pero sí inconsciente y gravemente herida, los médicos informaron "jamás volverá a correr". Ante todo pronóstico, regresó a unos Juegos Olímpicos en Berlín 1936 para ganar una medalla de oro en los relevos 4x100.
Wilma Rudolph fue un ejemplo de resiliencia desde su llegada al mundo, pues nació prematuramente y a los 4 años sufrió una doble neumonía. Dos años después, la diagnosticaron con poliomielitis, enfermedad cuya secuela le dejó temporalmente paralizada una pierna hasta su adolescencia.
Con un panorama adverso, Wilma Rudolph logró convertirse en la mujer más rápida del mundo en los Juegos Olímpicos de Roma 1960. Esto tras obtener el oro en los 100 metros, 200 metros y los relevos 4x100, la multimedallista también batió los récords olímpicos en las tres categorías.
Simone Biles es un ejemplo a seguir para el mundo, no solo por ser siete veces medallista olímpica, sino por priorizar su salud mental. La gimnasta estadounidense habló durante su participación en Tokio 2020 donde reveló que se retiró de la final del all around por no sentirse bien emocionalmente.
También, Simone Biles expresó sentirse más nerviosa de lo normal, se divertía menos y la presión le estaba afectando. "Yo digo que la salud mental es primero, a veces está bien no participar en las grandes competiciones para centrarse en uno mismo", aseveró.
A pesar de su retiro prematuro de la competencia, Simone Biles regresó para competir en la final de barra de equilibrio donde su participación fue impresionante. Su determinación y valentía le hicieron ganar la plata y el bronce además de convertirse en una defensora de la salud mental.
La lista de mujeres que han cambiado la historia del deporte es amplia, ya quedó atrás cuando solo participaron 22 mujeres de los 997 atletas en los Juegos Olímpicos de París 1900. En Tokio 2020, el 49% de los 11 mil atletas fueron mujeres y se espera que para la edición de París 2024 la cifra alcance por primera vez el 50%. (NotiPress)