La globalización, el capitalismo y la crisis económica de la mayoría de los países han provocado que muchos jóvenes opten por la llamada nueva cultura del emprendimiento, es decir, el arranque de un negocio propio que los lleve a la tan anhelada independencia económica.
Esto ha provocado que cada vez más surjan nuevos negocios desde esta óptica, pero de acuerdo con los expertos su éxito no siempre está relacionado con el giro comercial, sino con la forma en la que se administra.
Por eso, a continuación te dejamos una lista con algunos giros comerciales que son comunes pero a la vez exitosos entre los jóvenes que deciden arrancar por su cuenta un negocio, por la falta de empleos o por los malos salarios.
Alimentos
La comida es uno de los giros comerciales más socorridos por los emprendedores, pues si bien requiere de un conocimiento específico, el retorno de la inversión es uno de los más rápidos, además de que el público meta es prácticamente todo el mundo.
Comer es una de las actividades vitales de los seres humanos y es por ello que la venta de comida es uno de los giros comerciales más empleados, aunque hay algunas variantes que resultan ser más exitosas en la actualidad.
Si bien hace unos años los emprendedores pensaban en la comida como una fonda o una cafetería, en la actualidad los negocios que están surgiendo apuntan más hacia los nuevos hábitos alimenticios.
Por ejemplo, hay negocios de comida que están enfocados a los alimentos veganos; otros, dedicados exclusivamente a los postres; mientras que otros apuntan hacia los alimentos orgánicos.
Estas tres variantes son las más populares, aunque no las únicas, y también de las más exitosas, pues están en un nicho de mercado específico y aparentemente no existe aún demasiados competidores que puedan mermar sus ventas.
Ejercicio
Los nuevos hábitos alimenticios también están ligados directamente con el ejercicio, de ahí que algunos emprendedores estén viendo en este mercado una oportunidad de crecimiento.
Por ejemplo, instalar un gimnasio es uno de los modelos de negocios a los que más están recurriendo en la actualidad, pues si bien es costoso, cuenta con un mercado amplio en la actualidad que podría hacer que la inversión retorne más rápido.
Pero en este mismo giro comercial están otros modelos de emprendimiento como pueden ser los salones de aerobics, que requieren menos equipo que un gimnasio y también se dedican a la actividad física.
Coaching
La consultoría y el coaching es otro de los nichos comerciales que está siendo sumamente atractivo para los emprendedores, pues constantemente existen personas que desean aprender nuevas cosas sin tener que tomar una carrera universitaria completa.
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Por ejemplo, un consultor legal puede ayudar a una empresa a atender ciertos temas relacionados con litigios, derechos y marcas, actividades que antes eran completamente asociadas a los bufetes jurídicos.
Curiosamente, dentro del coaching también existen emprendedores educando a otros emprendedores, a través de la transferencia de conocimientos o de procedimientos exitosos que pueden ser aplicados al momento de emprender.
Ropa
Emprender no debe verse únicamente como la actividad de instalar un negocio completamente formal, pues es ahí donde entran aquellos emprendedores que deciden no rentar un negocio o poner una oficina y simplemente apoyarse en las redes sociales.
Este mercado se está viendo inundado por emprendedores que se dedican a la venta de ropa, los cuales buscan en este modelo de negocio un ingreso ante la alta demanda de ropa.
Los modelos de emprendimiento de la ropa son variados y pueden ir desde aquellos que se dedican a la venta por catálogo, hasta los que deciden vender ropa de marca, pasando por aquellos que ofrecen ropa extranjera.
Si bien estos son algunos de los modelos más frecuentes por parte de los emprendedores, lo más importante siempre es iniciar un negocio conociendo todos los riesgos que hay, así como la inversión.
Hay diferentes consejos para abordar un negocio propio, pero lo más importante siempre será invertir en un área en la que haya un conocimiento básico y con disposición a la capacitación para agilizar el periodo de aprendizaje, tratando de superar los otros dos años de vida promedio que tienen las pequeñas y medianas empresas en México.
