“Cocaine Bear” se ha convertido en una de las películas más esperadas del año, pues su sinopsis muestra algo de lo que pocas veces se ha hablado. Se trata de una comedia de terror en la que un oso ingiere cocaína luego de que un narcotraficante muere en medio del bosque.
Lo curioso de esta producción es que está basada en hechos reales. Elizabeth Banks, la directora de “Cocaine Bear”, no dejó pasar la oportunidad de convertir en película una insólita historia verdadera que sucedió en los bosques de Georgia en 1985.