¿Genios informáticos o maestros del engaño? Así son los hackers

A diferencia de lo que se pudiera pensar, hackear una cuenta de redes sociales no requiere mucha preparación en áreas como informática o programación. A veces, simplemente con conocimientos muy básicos y engaños a la gente se puede acceder a su información.

Estas plataformas son unas de las vías de comunicación más importantes de la actualidad, es cada vez más frecuente que los grupos delincuenciales se centren en ellas para intentar sustraer información con fines como el robo, suplantación de identidad o extorsión.

Las personas que se dedican a este ilícito han desarrollado nuevas formas para robar datos y se han adaptado a las barreras de seguridad de las aplicaciones.

¿Cómo entran a nuestras redes? Hay múltiples formas en las que lo pueden hacer, en algunas incluso nosotros damos inocentemente los datos que estos ciberdelincuentes requieren.

Lo más usual es que obtengan nuestra información después de que damos clic en un enlace que nos lleva a una página fraudulenta, donde, al entrar, se descarga un virus que da acceso a nuestras contraseñas y correos.

Otra forma es cuando se suplantan las páginas oficiales de Facebook, Instagram y otras redes, donde se piden nuestras contraseñas y demás datos. Al ingresarlos, pensando que se trata de las páginas verificadas, damos el acceso completo a nuestras cuentas.

Los métodos van cambiando y ya no es necesario que se usen programas especializados, pues también hay quienes fingen ser páginas de soporte técnico. Con esto, los delincuentes tratan de darse legitimidad y ganar la confianza de los usuarios, haciéndolos entregar sus credenciales y luego modificándolas para que el dueño original pierda la cuenta.

Lo más novedoso es que se vulneren las cuentas de WhatsApp por medio del buzón de voz que viene de fábrica en los dispositivos. Primero lo sobrecargan y, cuando se quiere abrir WhatsApp en un dispositivo extra, se manda la contraseña de acceso mediante una llamada, la cual va a dicho buzón y se extrae de ahí mismo.

Ante estos riegos de ciberseguridad, la policía en materia ha emitido consejos que se pueden adicionar a los ya conocidos para reforzar la firmeza de nuestros perfiles.

Utilizar contraseñas fuertes, es decir, que sean combinaciones difíciles de adivinar. Para ello se aconseja el uso de mayúsculas, números y signos que la hagan más fuerte.

Algo común es que se evite a toda costa entrar en links que nos lleguen desde perfiles o correos electrónicos que se vean poco confiables. Esto se puede constatar si, al revisarlos, se ven pocos seguidores y ninguna publicación real, más que la difusión constante de los mismos enlaces.

Tampoco se debe mandar nuestros documentos de acceso o información delicada como números de cuenta o contenido privado por estos medios, incluso a perfiles de amigos. Si nuestras cuentas son plagiadas, estos archivos quedan expuestos a cualquiera.

Finalmente, el uso de conexiones públicas internet también es un medio por el cual se da la intromisión. Una vez conectados se puede ver los datos que enviamos y recibimos, incluidas redes sociales y contraseñas. Su uso se debe evitar en la medida de lo posible o, en dado caso, apoyarse de un VPN que cuide nuestra IP.