El futbolista Dani Alves fue detenido al llegar a Barcelona por la acusación en su contra de presunta agresión sexual, cometida hacia una mujer en una discoteca el pasado diciembre.
El brasileño declaró en la comisaría durante las primeras horas de este 20 de enero y posteriormente fue trasladado al juzgado a bordo de una patrulla.
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El caso será decidido por un juez, ya que de momento hay dos opciones concluyentes para el futbolista, la primera es ir a prisión, que parece más lejana y poco probable, mientras que la otra vertiente es que reciba la libertad por cargos.
Alves fue denunciado formalmente el 2 de enero, pues la víctima lo acusó de presuntamente haberla tocado sin su consentimiento en el centro nocturno Sutton, ubicado en Barcelona.
El incidente habría ocurrido durante las vacaciones por fiestas decembrinas del jugador, días antes de que reportara con Pumas, su actual equipo.