La necesidad de un director de contar historias a través de la lente, poniendo énfasis en lo que pasa por su cabeza para colectivizarlo, va más allá de vender su visión a los demás, se trata de un hecho centrado en el valor de compartir un relato sin interés económico de por medio y con el riesgo de no ser entendido por muchos, muy a pesar de las críticas que esto pueda propiciar.
Basta con recordar que, en 1916 cuando David W. Griffith un cineasta ya consagrado por su cinta “El nacimiento de una nación” del año anterior, presentó su magistral película “Intolerancia”, con la cual inició la búsqueda formal del lenguaje cinematográfico, la mayoría de los críticos de la época aplastaron su trabajo, la cinta de la que hoy le hablo, ‘Historias del desencanto’, ópera prima de Alejandro Valle, inauguró en nuestro país la etapa del género fantástico.
Se trata de una cinta complicada y llena de personajes míticos, creada con escasos recursos que al final permiten al espectador reinterpretar la idea de la creación cinematográfica - ¿o audiovisual?
Este largometraje, realizado en 2006 y apoyado por el IMCINE, fue hecho con cámara de video casera, pretendiendo mostrar una nueva forma de creación cinematográfica y buscando –como lo dijo su director- “saber si en la actualidad la inocencia todavía es posible”. Es una fuente inspiradora que ya ha dado frutos, pues en la actualidad ya se hace cine (digital) con celulares, incluso existen diversos festivales al respecto.
La fantasía del argumento, establecido en un “limbo” entre el siglo XX y el XXI, es engalanada con una soberbia actuación de Fabiana Perzabal y Jimena Ayala, quienes nos enseñan la madurez actoral que habían conseguido alcanzar ya en aquel momento, así como la voz del rockero de toda la vida, Jaime López, que nos ofrece el tono melancólico que todo filme requiere.
Ciertamente fue una película que por el limitado presupuesto con el que fue rodada, sólo salió al mercado con diez copias, que estuvieron en circulación por las salas de la capital de la República y llegaron al resto del país algunas semanas después, pero que por la falta de publicidad, prácticamente paso inadvertida.
Si bien no es fácil entender las ‘Historias del desencanto’ para quienes no acostumbran a presenciar este cine alejado de las grandes producciones hollywoodenses, es una buena opción para ver algo diferente y ser testigos de las tendencias de la cinematografía mundial adaptadas a México.
Por cierto, su director subió una copia a YouTube para beneplácito de los amantes del cine, así que puede deleitarse de manera gratuita de este filme.
Sólo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico trejohector@gmail.com o sígame en mis redes sociales “Cinematografo04” en Facebook y Spotify, así como “Cinematgrafo04” (sin la “ó”) en Twitter.