La icónica actriz estadounidense Jane Fonda dijo el viernes que fue diagnosticada con el tipo de cáncer linfoma no Hodgkin, pero que ya comenzó con un tratamiento de quimioterapia contra la enfermedad.
"Amigos, tengo algo personal que compartir. Fui diagnosticada con linfoma no Hodgkin y empecé tratamientos de quimioterapia. Es un cáncer muy tratable. 80 por ciento de la gente sobrevive, así que me siento muy afortunada", anunció la actriz de 84 años en su cuenta de Instagram (prohibida en Rusia por actividad extremista).
Fonda, ganadora de dos premios Oscar –en 1972 y 1979- en la categoría de mejor actriz, dijo que el tratamiento será de seis meses, pero que ello no le impedirá seguir con su activismo climático.
"Estoy manejando los tratamientos bastante bien y, créanme, no dejaré que nada de esto interfiera en mi activismo por el clima. El cáncer es un maestro y estoy prestando atención a las lecciones que tiene para mí", afirmó.
El linfoma no Hodgkin en adultos es una afección por la que se forman células malignas (cancerosas) en el sistema linfático y puede comenzar en prácticamente cualquier parte del cuerpo, aunque en la enorme mayoría de los casos aparece en los ganglios (por ser el lugar donde hay más cantidad de linfocitos), según las autoridades de salud.
La actriz, hija del legendario actor Henry Fonda, comenzó su carrera en la gran pantalla en 1960 y durante tres décadas apareció en más de 30 películas, entre ellas las aclamadas "Descalzos en el parque", "Klute" y "El Regreso".
Fonda fue blanco de duras críticas en 1972, con calificativos hasta de "traidora", por su visita a Vietnam del Norte, en plena guerra de Vietnam (1959-1975), una polémica que todavía la persigue 50 años después.
Entre 1990 y 2005 se alejó de la industria cinematográfica y en la última década protagonizó varias series premiadas, como "The Newsroom", sobre el mundillo periodístico; la comedia "Grace y Frankie" y "Stoner Cats", una serie animada sobre cinco gatos que desarrollan consciencia.