La industria del cine ha tenido diversos obstáculos para proyectar varias cintas en algunos países debido a la estricta censura, uno de los ejemplos más conocidos es China, que habitualmente recorta o modifica escenas para permitir la distribución de películas en su territorio. En esta ocasión, la noticia es más sorprendente, pues las regulaciones de aquel país han afectado al contenido infantil, específicamente al filme “Minions: Nace un villano”.
Los censores chinos permitieron la proyección de la cinta con la condición de que se modificara el final de la historia, pues consideran que la escena original no daba un buen ejemplo a la sociedad, por lo que el desenlace de uno de los personajes principales fue cambiado.
Wild Knuckles, quien en la película ayuda a acometer el robo y sale indemne, en la versión de China es detenido por la policía y sentenciado a veinte años de cárcel, al menos así lo dice un bloque de texto insertado por los censores. También se explica que Gru finalmente regresa con su familia y que su mayor logro es “ser el padre de tres niñas”.
El final original de la historia es muy distinto, pues Gru y Knuckles huyen juntos después de que este último fingiera su muerte para evitar ser capturado, algo que no gustó mucho en China, por lo que decidieron alterar el final para “dar un buen ejemplo a su pueblo”.