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Hace unos días quedaron nuevamente en evidencia los problemas de seguridad que aún se tienen en las aplicaciones de banca móvil de México, luego de que la actriz Verónica Bravo revelara que le fue robado su celular y le fue vaciada su cuenta de BBVA Bancomer, pese a que no tenía ninguna contraseña en su smartphone, algo que deja ver que los filtros de seguridad de estas aplicaciones aún son muy vulnerables.
Aunque es cierto que conforme ha pasado el tiempo y con la pandemia de COVID-19, los bancos comenzaron a reforzar la seguridad de sus aplicaciones, aún no se garantiza al 100 % que el dinero de los usuarios esté seguro, pues el caso de Verónica Bravo es uno de muchos que se siguen presentando con este tipo de mecanismos digitales.
