Una joven australiana de 26 años ha heredado 12 millones de dólares tras el fallecimiento de su padre, pero no puede hacer uso del dinero debido a que se ha negado a tener un trabajo estable y “aportar algo a la sociedad”, que fue la única condición establecida para que pudiera recibir la herencia.
Se trata de Clare Brown, una mujer que no está dispuesta a conseguir empleo, pues según ella, su estado de salud no se lo permite. "Entiendo por qué quieren que sea un miembro funcional de la sociedad, sin embargo, tienen que mirar mi diagnóstico y darse cuenta de que eso no va a suceder", declaró la joven durante una entrevista para el programa A Current Affair.
"No voy a aprender a conducir porque tengo TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad). Tengo la capacidad de atención de un mosquito", agregó. Por otro lado, Brown aseguró que las condiciones establecidas por su padre la están “arruinando”, por lo que ha estado viviendo de las ayudas sociales.
"A mi familia le diría que me dieran lo que es mío por derecho. Estoy sufriendo", explicó. Actualmente, la joven vive junto a su mujer y su hija en los suburbios al oeste de Sídney. "Me he autodenominado millonaria arruinada porque estoy arruinada constantemente y no puedo hacer nada al respecto", explicó Brown, quien remarcó su déficit de atención, que la obliga a organizar su vida a través de listas.
En este sentido, su familia alegó que su trastorno solo es una excusa. "Nos gustaría que consiguiera un trabajo y contribuyera a la sociedad. En lugar de aceptar los deseos de su padre fallecido, ha hecho lo contrario y ha demandado a su fideicomiso. No sabemos qué hacer. No hemos hecho otra cosa que querer a Clare", expresó la familia.
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