Un equipo de geólogos de la Universidad de Virginia Occidental anunció el descubrimiento de unos microbios atrapados en cristales de halita (cloruro de sodio, sal de roca común) que datan de hace 830 millones de años. Lo increíble de este hallazgo es que los investigadores sostienen que estos organismos podrían seguir con vida.
Este descubrimiento tiene implicaciones para la búsqueda de vida en rocas sedimentarias tanto terrestres como extraterrestres, esto en referencia a los grandes depósitos de sal encontrados en Marte recientemente.
Diversos científicos encontraron en investigaciones anteriores microfósiles antiguos incrustados en rocas, como esquistos, que tienen miles de millones de años. La sal no es capaz de almacenar materia orgánica de la misma manera. En cambio, cuando se forman cristales en el ambiente marino, algo de líquido puede permanecer en el interior. Este fenómeno se llama “inclusiones fluidas”.
Estos cristales son valiosos desde el punto de vista científico debido a que pueden contener información sobre la temperatura del agua, su composición química e incluso la temperatura de la atmósfera en el momento en el que se formó el mineral.
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— Portal Diario (@PortalDiarioAR) May 17, 2022
A pesar de ya se habían encontrado microorganismos que viven en este tipo de inclusiones, los investigadores todavía no habían logrado determinar si estos microbios tienen la misma edad que el mineral.
Para determinarlo, los científicos estudiaron el núcleo de la formación geológica de Browne, en Australia Central. En su análisis utilizaron sofisticadas técnicas no destructivas para identificar y documentar material orgánico en inclusiones fluidas primarias en halita de 830 millones de años. Los resultados señalaron que los organismos que se conservaron dentro datan de la época en la que se formaron los cristales de sal.
Dentro de los cristales, los científicos encontraron sustancias orgánicas sólidas y líquidas características de las células procariotas y eucariotas. Posteriormente, estas sustancias fueron examinadas con fluorescencia y se logró determinar que manifestaron colores compatibles con la descomposición orgánica, mientras que otras mostraron la fluorescencia de los organismos modernos.
Esto sugiere que podría haber organismos unicelulares vivos dentro del núcleo estudiado. “Es posible que existan microorganismos de la Formación Browne del Neoproterozoico”, concluye el estudio.