Michael Jordan es considerado por muchos como uno de los mejores jugadores en la historia de la NBA, su trayectoria marcó el deporte durante generaciones e incluso hoy sigue inspirando a miles de personas, pero a pesar de esto, parece que el “23” no mostró su máximo nivel, pues uno de sus compañeros en los Chicago Bulls reveló que el mítico jugador “no durmió durante 14 años”, algo que mermó su rendimiento.
Estas declaraciones fueron hechas por el exjugador B.J. Armstrong, quien formó parte del famoso equipo que obtuvo el primer “three peat” (ganar tres títulos de manera consecutiva) junto a Jordan y otras leyendas del baloncesto como Scottie Pippen y Horace Grant.
“Literalmente, no durmió en 14 años”, indicó Armstrong. “Vi a Jordan jugar 35-40 minutos por noche y luego volver a entrenar con la misma energía. Nunca he visto a un tipo tan competitivo y siempre estaba activo. En los entrenamientos me di cuenta de que era diferente, cuando todos los demás estaban cansados, sonaba el silbato y él actuaba como si hubiera dormido 10 horas y en realidad estuvo jugando a las cartas o lo que fuera que había estado haciendo, sin haber comido ni descansado bien”, agregó.
#TalDiaComoHoy Michael Jordan lograba un récord de 63 puntos en los Playoffs de la #NBA 20/04/1986 pic.twitter.com/9TIblkcNnY
— Fer Agras (@AgrasFernando) April 20, 2022
A pesar de que muchos analistas y aficionados colocan a Jordan como el mejor basquetbolista de todos los tiempos, Armstrong aseguró que se podría haber visto una mejor versión del jugador si hubiera tenido más cuidado con su físico y su vida privada.
“Si hubiera dormido, no sabemos lo bueno que realmente habría sido. No vimos lo mejor de Michael Jordan porque no durmió en esos 14 años. No es que durmiera poco, es que no dormía”, explicó el exjugador.
Durante su carrera, Jordan ganó seis veces el título de la NBA, siendo el MVP en todas las finales. Además, obtuvo cinco MVP de la temporada regular, fue All Star en 14 oportunidades y en 10 finalizó como el máximo anotador de la competición. También ganó el oro olímpico en dos ocasiones (Los Ángeles 1984 y Barcelona 1992).
“Fue el mejor jugador en los entrenamientos que he visto. Nunca he visto a un chico entrenar tan duro y eso es lo que deberíamos mostrarles a los niños. Porque solo les mostramos los partidos cuando las luces estaban encendidas. Yo estaba en el mismo lugar que él y estaba un poco cansado, todos los demás estaban un poco cansados. Menos él, que no había dormido”, concluyó Armstrong.