
Este lunes llega a su fin la modalidad híbrida de clases en Puebla y miles de estudiantes deberán regresar a clases presenciales, situación que no se presentaba desde hace ya dos años, cuando inició la pandemia de COVID-19.
Además del golpe económico que representa este regreso presencial para los padres de familia, también se presentará nuevamente la angustia y el estrés de papás y mamás, debido a varias cuestiones que rodean este retorno a las aulas.
???? | Se vienen los gastos y compras de pánico para padres de familia, luego de que el Gobierno anunció el regreso a #clases presenciales.???????????? https://t.co/sc3s2gqOgd
— Imagen Poblana (@ImagenPoblana) April 22, 2022
Por principio de cuentas debemos tomar en cuenta que muchos padres de familia estarán preocupados por la salud de sus hijos, tanto los que ya enviaban a los menores a las escuelas como los que los enviarán por primera vez en dos años.
Y es que aquellos padres que ya mandaban a clases presenciales a sus hijos estarán preocupados por un riesgo de contagios con los salones llenos, mismo caso de los que apenas mandarán a sus hijos a las aulas, pues ya no podrán cuidarlos al extremo.
Otra de las grandes angustias de los padres de familia será el regresar a la rutina que se tenía antes de la pandemia, pues en dos años no tenían que preocuparse por levantar y preparar a sus hijos para ir a la escuela.
Regresarán a clases presenciales más de 1’600,000 alumnos: SEP https://t.co/1Q138WVukC
— Imagen Poblana (@ImagenPoblana) April 20, 2022
Sin duda las cosas han cambiado en la manera de vivir de todos por la pandemia, por lo que ahora a los padres de familia les costará trabajo nuevamente madrugar, ya que ahora el preparar a los hijos a la escuela deberá incluir vigilar que lleven su cubrebocas y algún gel antibacterial.
Asimismo, el estrés se presentará con la necesidad de manejar primero hacia la escuela y luego hacia el trabajo, lo que aumentará con el tráfico que seguramente se presentará en las principales vialidades de la ciudad.
La angustia estará presente en los padres que se vean en la necesidad de llevar y traer a sus hijos en el transporte público o enviarlos solos, pues es un hecho que las unidades estarán llenas y además de un riesgo de contagio, hay riesgos de seguridad constantes.
No obstante, es momento de que se comience a recuperar un poco la normalidad con la que se vivía antes de la pandemia, tomando en cuenta que los retos a los que se enfrentarán padres y alumnos no serán nuevos.