Taylor Hawkins, baterista de Foo Fighters, fue hallado sin vida este viernes tras presentar un dolor en su pecho. Los servicios de emergencia no lograron llegar a tiempo a su habitación de hotel en Bogotá para evitar la muerte del artista, pero determinaron que la causa de esta había sido una sobredosis.
El opio, la mariguana y diversos antidepresivos (tricíclicos y benzodiazepinas) eran algunas de las sustancias que los científicos hallaron en el cuerpo del artista. El examen toxicológico demostró la presencia de al menos 10 sustancias en el sistema de Hawkins justo antes de su muerte, situación que decepcionó a los fanáticos que se dirigían a verlo actuar ese fin de semana.
“El Instituto Nacional de Medicina Forense continúa con sus estudios médicos para poder esclarecer por completo los hechos que llevaron a la muerte de Taylor Hawkins… se continuará con la investigación y se darán a conocer los resultados obtenidos como parte de esta, según corresponda”, declaró la fiscalía general de Colombia.
Taylor tenía 50 años y llegó a los Foo Fighters en 1997. Compartió escenario con Dave Grohl, Nate Mendel, Pat Smear, Chris Shiflett y Rami Jaffee. Esta presentación en Colombia era parte de su gira por Latinoamérica que fue cancelada esa misma noche.