No me quedo con el “no”, siempre busco el “sí”: Donovan Carrillo

No me quedo con el “no”, siempre busco el “sí”: Donovan Carrillo

Foto: Xinhua

Al terminar su rutina libre en el Estadio Cubierto de la Capital en Beijing, Donovan Carrillo tocó los cinco anillos olímpicos dibujados en el hielo de la pista con gran ternura. "Esto es solo el inicio", afirmó el atleta mexicano sonriendo.

 

El joven de 22 años es el único patinador artístico latinoamericano en los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022 y rompió una ausencia de 30 años de México en este deporte.

 

Concluyó su competencia olímpica alcanzando su puntuación máxima en la rutina libre de esta temporada, con 138,44 unidades. Después de ejecutar el martes una rutina que le brindó 76,69 puntos, Carrillo cumplió el mejor programa corto en su carrera deportiva, y se convirtió en el primer mexicano en llegar a la final de las competiciones olímpicas.

 

Entusiasta, apasionado y enérgico, el joven interpretó su programa con alegría contagiosa que cautivó la atención del público en todo el mundo.

 

"Besos para mi familia y todo México. Los sueños se hacen realidad", expresó Carrillo después de su rutina corta mostrando a la cámara sus protectores para cuchillas de patines de hielo, cuyos colores son verde, blanco y rojo, simbolizando la bandera nacional de su país.

 

"Recibí numerosos mensajes de mi país y me decían que estaban súper orgullosos de mí. Estoy motivado para dar lo mejor de mí y seguir luchando por más sueños", dijo Carrillo.

 

Orgullo del "Hecho en México"

 

Tras enamorarse del patinaje artístico a los ocho años, Carrillo ha basado toda la cadena de su disciplina en su identidad mexicana. Insiste practicando en las pistas de hielo en su país bajo la guía del entrenador mexicano Gregorio Núñez.

 

Poniéndose de pie sobre la pista de hielo olímpica, Carrillo vistió un traje de competición que le fue dado en forma gratuita por el diseñador, también mexicano, Edgar Lozano. Cada uno de los 17.000 cristales que decoraban el atuendo representaba el carisma de su dueño.

 

"Para mí es un honor representar a mi país en un deporte de invierno. Desde mis inicios en las competencias internacionales siempre he buscado enaltecer mi cultura a través de la música y esta ocasión no es la excepción", expresó Carrillo.

 

Interpretó su debut olímpico con la música del emblemático guitarrista mexicano Carlos Santana, quien al igual que el joven patinador es originario del estado de Jalisco. Su presentación en patinaje libre comienza con la canción "Perhaps, Perhaps, Perhaps" en inglés y español, conectando con los temas "Sway", "María" y "Bailar".

 

"Es un programa bastante latino del cual me siento muy orgulloso y espero que la gente pueda disfrutarlo tanto como yo en estos Juegos Olímpicos", enfatizó.

 

Buscar hielo en zona tropical

 

En la competición del martes, Carrillo realizó el primer salto cuádruple Toe en una justa olímpica en la historia mexicana. "Incluir el Toe es la mejor decisión que tomamos. Este salto que llevo practicando casi dos años es la cereza del pastel".

 

Cumplió su rutina de patinaje con saltos estupendos, parecía que el joven reinaba en el hielo sin la menor dificultad. No obstante, en la práctica antes de las competiciones, Carrillo reveló que necesitó tiempo para acostumbrarse al tamaño de la pista de hielo aquí.

 

"He tenido la oportunidad de entrenar en las mejores pistas de hielo en mi país, en Querétaro, ciudad de México, incluso Monterrey, pero ninguna es de la dimensión oficial de los Juegos Olímpicos", dijo el patinador.

 

Ubicándose en zona tropical, la capital de México no ha sido cubierta por nieve en los últimos 55 años. El clima del país genera que los deportes de invierno cuenten con poca popularidad en comparación con el fútbol, el béisbol o la lucha libre, y faltan infraestructura e instalaciones dedicadas al patinaje.

 

A los 13 años Carrillo tuvo que mudarse lejos de su familia, a León, debido al cierre de la pista de hielo donde entrenaba en Guadalajara. La pista de hielo de León de Guanajuato ofreció trabajo como coordinador de la academia de patinaje artístico a su entrenador y brindó becas a Carrillo para que pudiera seguir adelante hacia su sueño olímpico.

 

Sin embargo, esta pista se localiza en un centro comercial, y tuvo que entrenarse junto con la gente que iba allí a divertirse. "A veces no puedo patinar un programa completo, porque sube la música para la sección pública", explicó Carrillo.

 

"Es un desafío, pero no es imposible. Trato de sacar el mayor provecho de lo que sí tengo, aunque muchas veces no es lo mejor", dijo el atleta optimista.

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