Este 1 de febrero se celebra el Año Nuevo Chino, que para esta ocasión corresponde al Tigre, que será el animal que dirija los destinos de la humanidad y ayudará a que se tomen las mejores decisiones, esto de acuerdo a la creencia china.
El origen de esta celebración va de la mano con la creación del horóscopo chino, que vio la luz hace miles de años y que hoy en día se sigue tomando como eje rector del calendario de este país asiático.
De acuerdo con la mitología china, el Emperador de Jade, gobernante del cielo, buscó que 12 animales fueran pare de su guardia real, por lo que les ordenó cruzar un río a través de una carrera para poder llegar a la puerta celestial.
Conforme los animales cruzaran esta puerta se les daría un año diferente, siendo la Rata el primer animal en cruzar la meta, seguido del Buey y del Tigre, por lo que a todos se les dieron los primeros años del horóscopo chino.
Al igual que la celebración del año nuevo occidental, en el Año Nuevo Chino se lleva a cabo una gran celebración que incluye fuegos artificiales y una cena donde se sirven platos tradicionales y de temporada, destacando el uso de mandarinas.
Infinidad de luces adornan los hogares chinos en este festejo, donde además los habitantes tienen la costumbre de limpiar hasta el último rincón de sus casas, a fin de que lleguen totalmente renovados a este nuevo año.
Los colores dorado y rojo dominan las decoraciones de los hogares chinos, pues son considerados para atraer buena suerte y dinero, dejando ver que en China las supersticiones tienen un papel fundamental en todas las familias.
De acuerdo a la creencia china, los niños que nazcan en este año serán valientes y competitivos, cualidades propias de un animal como es el Tigre.
