México es un país donde se come muy bien. De norte a sur, de este a oeste, de costa a costa, nuestro país tiene un menú amplio de platillos que ponen a México como una de las naciones con mejor gastronomía.
Verdaderos manjares a base de moles, carnes y mariscos puede presumir nuestro país, incluidos postres y bebidas que maravillan al planeta y que se ponen de moda constantemente en restaurantes internacionales.
Pero hay una parte de la gastronomía mexicana que tal vez solo conocemos los mismos mexicanos y esta es mostrada en la docuserie de Netflix denominada “La Divina Gula”, donde podemos ver “rarezas” deliciosas de nuestro país.
Narrada por Memo Villegas, cómico conocido por el sketch denominado “Harina”, “La Divina Gula” hace un recorrido por sitios excéntricos de México donde podemos encontrar las más ricas “rarezas” de la gastronomía mexicana.
Las micheladas en todas sus presentaciones, que van desde la combinación de la cerveza con el clásico limón y clamato hasta los extravagantes michecocos, son parte de los manjares que se pueden ver en esta serie.
Qué decir de las botanas raras que disfrutamos los mexicanos, que van desde unas “papas locas” hasta los “Doritos” con esquites, antojitos que nadie se puede resistir y que pese a la gastritis que provocan siempre son parte de la vida nacional.
No se deja de lado el bendito postre, mostrado por dulces combinaciones de “a litro” hasta una criticada, pero deseada, torta de gelatina con rompope, sin olvidarnos de unas banderillas dulces hechas de cualquier cusquería.
Los huaraches y demás antojitos callejeros de a kilo tampoco son olvidados, dejando ver que en nuestro México se come bien y se come con ganas, pues en el arte de devorar delicias los mexicanos nos pintamos solos.
Si usted quiere pasar un momento en la tele que le despertará los más oscuros deseos culinarios, entonces no se puede perder “La Divina Gula” este fin de semana.
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