El tenista serbio Novak Djokovic, atribuye a su agente la responsabilidad de completar erróneamente la sección de historial de viajes del formulario que usó para ingresar a Australia, en el cual negaba haber viajado en los 14 días previos a su llegada al país, pero informes recientes sugieren que había estado en Serbia y España.
"Mi agente se disculpa sinceramente por el error administrativo al marcar la casilla incorrecta. Este fue un error humano y ciertamente no deliberado", escribió Djokovich. Además agregó que su equipo había proporcionado información adicional al gobierno australiano "para aclarar este asunto".
Debido a esto, el Gobierno Australiano revocó la visa del tenista el pasado 6 de enero, luego de detenerlo en el aeropuerto de Melbourne y mantenerlo en cuarentena en un hotel. El Gobierno también considera la posibilidad de deportar al tenista, lo que comprometería la participación en el torneo Abierto de Australia del 20 veces ganador del Grand Slam.
Por su parte, el tenista, quien diera positivo a coronavirus en diciembre pasado, publicó recientemente en su cuenta de Instagram un comunicado donde confiesa haberse reunido en Belgrado con un periodista para una entrevista de tenis 2 días después de que su prueba de coronavirus diera positivo el pasado 16 de diciembre.
"Acepto que debería haberla reprogramado", escribió el atleta serbio, "Me sentí obligado a seguir adelante y realizar la entrevista de L'Equipe porque no quería defraudar al periodista. [Me aseguré] de que me distancié socialmente y usé una máscara excepto cuando me estaban tomando la fotografía", continuó Djokovic en la publicación de Instagram.
Entre tanto, la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) exigió que se aclaren las reglas para ingresar a Australia e igualmente exhorta a los jugadores a que se vacunen contra el coronavirus. Incluso el padre del tenista número uno del mundo pidió a la reina Isabel II que intervenga en el caso de su hijo en Australia, quien no se encuentra vacunado contra el coronavirus.