Casi 11,000 haitianos fueron devueltos a su país desde el 19 de septiembre, 8,000 de ellos provenientes de Estados Unidos, a pesar del recrudecimiento de la violencia, poderío de las bandas y falta de oportunidades.
"Un mes después de Del Río casi 11,000 migrantes regresaron a Haití de diferentes países, 8,000 desde Estados Unidos. Los migrantes utilizan muchas rutas, incluidas las fronteras terrestres, aéreas y marítimas. Irse o empezar de nuevo en Haití es su dilema", dijo en Twitter Guisseppe Loprete, representante de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Cerca de 1,800 de los retornados son menores que regresaron con sus padres, aunque muchos de ellos ni siquiera nacieron en Haití.
Otros viajaron en precarias embarcaciones para recalar en las islas cercanas o ser interceptados por los guardacostas.
La falta de ingresos o de oportunidades de trabajo, el acceso insuficiente a los servicios para ellos y su familia, además del terremoto del 14 de agosto, unido a la inseguridad y la inestabilidad política, empujan a miles de ellos a migrar, reconoció la OIM.
Además de Estados Unidos, los migrantes han regresado de Cuba, Bahamas e Islas Turcas y Caicos, mientras un cuatro por ciento fueron encontrados por guardacostas.
"La mayoría de los retornados han estado fuera de Haití durante muchos años, enfrentándose a la desorientación cultural y a la falta de conocimiento del criollo haitiano. Además, se han identificado y devuelto niños migrantes no acompañados en las rutas marítimas hacia los Estados Unidos y otras islas del Caribe", dice un comunicado de la OIM.
La organización advirtió que se identificaron indicadores de trata de personas, ya que algunos menores expresaron temor a las personas con las que viajaban, estaban emocionalmente abrumados, carecían de información sobre el proceso de retorno y la incertidumbre sobre el seguimiento posterior.
