El 1 de octubre, el compañero presidente Andrés Manuel López Obrador envió a la Cámara de Diputados un proyecto de Decreto para reformar los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución relativos a la producción y distribución de energía. Ya es costumbre que los grupos conservadores salgan a oponerse; pues también será costumbre que las voces liberales salgamos a defenderlo, así que, aquí vamos.
Comisión Federal de Electricidad (CFE) es ineficiente y por eso se necesita a los privados.
FALSO. CFE producía antes de la Reforma de 2013 el 60% de la energía que se consumía en el país, además lo hacían a precios competitivos, por lo que no se justificaba de manera técnica la extensión de concesiones a privados, para ello se manipularon informes y se violaron leyes para presentar cálculos erróneos sobre los costos de generación y distribución.
Las empresas privadas están produciendo energía más barata.
FALSO. El Costo de producción de CFE es más barato que la mayoría de las empresas; sin embargo, los privados no desarrollan infraestructura para transportar energía y lo hacen a través de las líneas de CFE sin pagarle. La inclusión de empresas privadas generó un exceso de oferta, actualmente se producen 86,039 Megawatios (MW) aunque la demanda sólo es de 46,628 MW.
La Ley obliga a que CFE despache primero la energía producida por los privados, por lo que se queda hasta con el 45% de la energía que produce. La reforma de 2013 está generando pérdidas a CFE por 222.9 mil millones de pesos anuales, en beneficio de los privados, ¡Qué negociazo!
Las empresas privadas están produciendo energías limpias.
FALSO. El 55% de la energía limpia del país es producida por la CFE; aun así, la reforma de 2013 entrega un pago excedente a los productores privados por cada MW que generen de forma limpia. En este proceso no puede participar la CFE por lo que los estímulos para convertirse en empresa limpia son inexistentes. En cambio, la CFE ha sido obligada a pagar 6,159 millones de pesos a los privados por supuestas energías limpias, este monto equivale al 47% de la inversión que hicieron los privados. ¿En qué negocio se recupera tan rápido la inversión?
Por otro lado, no se considera que la llamada “energía limpia” proviene de fuentes intermitentes, por lo que su transmisión requiere de una infraestructura especial, alimentada por una corriente continua de base y no al revés como ocurre actualmente. Hoy las empresas privadas inyectan a las líneas de la CFE los MW de energía limpia, pero al ser intermitente están provocando desestabilidad en todo el sistema de suministro, lo que pone en riesgo de colapso a la red completa.
Las empresas privadas han traído inversión nueva al país.
FALSO. A los empresarios privados se les concedieron créditos provenientes del mismo Estado, como la banca de desarrollo y las Administradoras de Fondo para el Retiro (AFORES), todo ello a tasas de interés preferencial. También se obligó a la CFE a financiarlos y firmó contratos que les garantizan la recuperación de la inversión total y el pago oportuno a un precio fijo que hoy está por encima del mercado, esto significa que la CFE para vender a los consumidores finales tenga que subsidiar las diferencias. Al finalizar el contrato (20 años) la central eléctrica pagada con dinero de CFE se vuelve propiedad de los privados, véase gráfica 1. ¡Despojo inaudito!
Como se aprecia, la Reforma de 2013 estuvo plagada de mentiras y sólo está beneficiando a unos cuantos empresarios, algunos de ellos ni mexicanos son, como la española Iberdrola que hoy tiene los precios más altos de energía en Europa. En el largo plazo es insostenible, por lo que es urgente un Nuevo Sistema Eléctrico Nacional como propone el presidente.
Elaborado con datos tomados de Decreto de Reforma 01 oct 2021.
Con el Decreto de Reforma, CFE podrá acceder a estímulos para la generación de energía limpia, incluyendo la construcción del megaparque fotovoltaico en Sonora y renovar por lo menos 10 hidroeléctricas. De igual forma se protege la explotación de minerales como el Litio y que sea el Estado el único agente. También, se plantea desaparecer los organismos paraestatales creados en 2013 como la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) para que sea la Secretaría de Energía la que asuma las funciones.
La reforma de la 4T elimina el nombre de “empresa productiva del Estado” a CFE para volverla un organismo de Estado que garantice el servicio eléctrico como un derecho humano a la vida digna y no como una mercancía. Eleva a rango constitucional el proceso de Transición Energética, para que se vuelva obligatoria una política científica y tecnológica que disminuya las emisiones de gases de efecto invernadero.
Es importante que todos conozcamos el texto con el que se propone el Decreto, es en sí mismo un documento de denuncia que explica cómo los neoliberales despojaron la industria eléctrica de la nación y formularon negocios millonarios a costa del pueblo. Además de informarlo y difundirlo debemos trabajar en comités de organización para defender la soberanía energética de la nación. ¡Ni un paso atrás!
*Profesor-Investigador Universidad de Quintana Roo
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores
Twitter: @BandalaCarlos