.gif)
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, mantiene el discurso que ha emitido desde inicio de su sexenio respecto a la producción de combustibles y la autosuficiencia que pretende lograr, promesa que parece casi imposible en estos momentos.
Este fin de semana, el mandatario publicó un video durante su visita a Xalapa, Veracruz, donde aseguró que antes de que termine su sexenio, México será autosuficiente en la producción de gasolina, manteniendo su apuesta por energías sucias.
.jpg)
Tal como ha señalado en ocasiones anteriores, el presidente colocó como punto central de su plan la rehabilitación de 6 refinerías, poniendo también como pilar de este plan a Petróleos Mexicanos (PEMEX), lo que genera más dudas que certezas.
La idea de López Obrador no es mala; sin embargo, parece que el plan está tomando un rumbo equivocado a la realidad que vive actualmente no solo México, sino todo el mundo, que va dando pasos a la generación de energías limpias y renovables.
De entrada, la idea del ejecutivo federal de poner al frente de este proyecto a PEMEX luce muy arriesgada, dado que esta paraestatal está atravesando por una grave crisis tanto en su operación como en sus recursos para extraer crudo.
Basta recordar que grandes ejemplos del mal momento que vive PEMEX son los dos incendios que han ocurrido en plataformas petroleras de la zona de Campeche, que incluso dejaron víctimas fatales sin que se tenga hasta el momento una explicación lógica.
En pocas palabras, PEMEX no cuenta ni con los recursos económicos ni con los recursos materiales, mucho menos con el personal, para lograr extraer la cantidad de crudo que tiene en mente el Gobierno Federal.
Por si fuera poco, México va en sentido contrario a lo que está marcado en el Acuerdo de París, firmado por nuestro país y que tiene como principal objetivo recortar en un 22% los gases de efecto invernadero para 2030, algo que no se cumplió en 2015.
Con la fuerte inversión para la construcción de la Refinería Dos Bocas y para rehabilitar otras refinerías, México le dice al mundo que las energías sucias seguirán siendo las principales en nuestro país, dejando de lado todos los acuerdos mundiales.
Junto con Brasil, México se está quedando fuera del cambio que se ve en otras naciones, que ya generan energías limpias y renovables con el objetivo de combatir el calentamiento global.
Lo anterior es de llamar la atención, ya que México es uno de los 15 países que más gases de efecto invernadero producen, aproximadamente el 1.47% de estos gases a nivel mundial, pero todo indica que nuestro país no asumirá la responsabilidad que le corresponden en la lucha contra el cambio climático.
