Pese a que en el mundo hay miles de personas, que se pueden calificar como ignorantes o fanáticas, en contra de la vacuna contra el COVID-19, la inoculación sigue avanzando, alimentando la esperanza de que pronto termine esta pandemia.
Los pretextos y mitos fomentados por los llamados “antivacunas” son diversos y sobre todo absurdos, algunos incluso rayando en ideas sin bases sólidas que parecen sacadas de una película de ciencia-ficción.