Casi ha pasado una semana de que se jugó el partido entre el Puebla de la Franja y Atlético de San Luis, en el que el marcador fue de 2 a 2, y la Comisión de Arbitraje recién reconoció que el silbante Juan Andrés Esquivel benefició a los camoteros al no expulsar a Emanuel Gularte.
En su reporte semanal en el que Arturo Brizio, encargado del arbitraje en la Liga MX, hace un análisis de la actuación de los jueces durante la jornada, remarcó que Esquivel tuvo que haber expulsado al defensor charrúa de los enfranjados por una dura entrada apenas al minuto 35 del primer tiempo.
En el encuentro que se desarrolló en el estadio Cuauhtémoc, el sudamericano tuvo una jugada con fuerza desmedida y ni el árbitro ni el VAR la percibieron, pero tras el análisis posterior al encuentro, la Comisión la señala como una de las dos fallas que los nazarenos tuvieron durante toda la fecha 8.
“El VAR debió sugerir revisión en cancha y el árbitro rectificar su decisión, expulsando al jugador #17 de Puebla por juego brusco grave (se trata de una entrada con uso de fuerza excesiva poniendo en peligro la integridad física de su adversario)”, apuntó el comunicado de la Comisión.
De haberse marcado con justicia la tarjeta roja sobre Gularte, el Puebla habría tenido que afrontar gran parte del encuentro con un hombre menos, una desventaja que pudo cambiar el desarrollo y hasta el marcador.
Sin embargo, al no haber queja por parte de los sanluisinos, Gularte podrá tener actividad el domingo en la visita poblana al Santos Laguna, si es que el técnico Nicolás Larcamón así lo decide, pensando en sustituir a Israel Reyes que sufre un esguince de tobillo.