El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) condenó hoy en términos enérgicos los ataques ocurridos en las inmediaciones del Aeropuerto Internacional de Kabul en los que decenas de civiles y de personal militar murieron o resultaron heridos.
En un boletín de prensa, los miembros del CSNU condenaron "en los términos más enérgicos posibles los deplorables ataques", los cuales fueron reivindicados por el Estado Islámico de la provincia de Jorasán, un afiliado afgano al Estado Islámico de Irak y el Levante.
Los miembros del consejo expresaron su solidaridad y ofrecieron sus condolencias a los familiares de las víctimas y desearon una pronta y plena recuperación a los heridos.
También "recordaron que todas las partes deben respetar sus obligaciones de conformidad con el derecho humanitario internacional, incluyendo las relacionadas con la protección a los civiles", indicó la declaración.
Además reiteraron que el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones constituye una de las más serias amenazas a la paz y la seguridad internacionales, indicó la declaración. "Atacar deliberadamente a civiles y al personal militar que ayuda en la evacuación de los civiles es especialmente abominable y debe ser condenado".
Destacaron también la necesidad de pedir cuentas y de presentar ante la justicia a quienes perpetraron, organizaron, financiaron y patrocinaron estos censurables actos de terrorismo, y exhortaron a todos los Estados, de conformidad con sus obligaciones en relación con las leyes internacionales y las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad, a cooperar activamente con todas las autoridades pertinentes en este sentido.
