Lakeyjanay Bailey, una joven afroamericana de 21 años, que viajaba de Denver a Dallas con su hermana adoptiva de cuatro años, acusó que fue discriminada por la aerolínea Frontier Airlines, ya que fue interrogada por la policía luego de bajar con la menor en brazos, pues fue denunciada por una pasajera del mismo vuelo que pensó que era una traficante de personas. Ahora su familia prepara una denuncia contra la empresa.
La joven afroamericana afirma que los empleados de la aerolínea Frontier Airlines la acusaron de traficar con su hermana, ya que es una niña blanca de cuatro años. Tras bajar del avión un oficial le preguntó a Olivia "si ella me conoce y qué soy yo para ella, y le preguntó qué era mi mamá para ella", entre otras cuestiones, acusó la chica. "Durante todo el tiempo que estuvieron hablando con nosotras, la gente siguió mirándonos, susurrando y esas cosas", lamentó Bailey.
Para comprobar sus dichos, la joven dijo que los agentes se comunicaron con su madre y una trabajadora social, e incluso después de comprobar que ambas son hermanas los elementos de seguridad las siguieron hasta la entrega de equipaje para hablar con la persona que las recogió.
El Departamento de Seguridad Pública del aeropuerto informó que los oficiales llevaron a cabo estas acciones en respuesta a una solicitud de Frontier Airlines, que pidió a la Policía que investigara el asunto después de que una pasajera mostrara su preocupación por un posible incidente de trata de personas que “involucraba a una mujer nacida en 2001 que viajaba con una mujer nacida en 2017”.
La compañía ratificó esta versión al medio Denver7 y detalló que la pasajera denunciante se acercó a la tripulación para comunicar su preocupación y que, posteriormente, completó un informe escrito durante el vuelo "para documentar sus observaciones". "El capitán fue notificado y se sintió obligado a informar del asunto", refiere la aerolínea, que explica que el transporte aéreo es "uno de los medios más comunes para la trata de personas" y que la tripulación solo "seguía los protocolos establecidos".
Por su parte, Bailey afirma que la atención que recibió es un caso evidente de discriminación racial, ya que "si se cambiaran los roles y fuera una persona blanca bajando del avión con una persona negra, como un niño negro, siento que las cosas serían diferentes", acusó
