La actriz Lucía Méndez asegura que habló con Quetzalcóatl, una de las deidades mexicas más importantes de la cultura mesoamericana, y fruto de aquella profunda “conversación” la también cantante afirmó que obtuvo el permiso para comenzar un nuevo proyecto.
En entrevista para el programa Hoy, la actriz dijo que decidió acercarse al dios prehispánico para emprender un proyecto y tener éxito con él, por lo que viajó hasta las faldas del volcán Popocatépetl para invocar a la deidad mexica.
Lucía Méndez relató: “Me paro en medio y le digo: ‘Quetzalcóatl, por favor, Quetzalcóatl, dame permiso para sacar esto’. Ustedes no me lo van a creer, (pero) está documentado; llegó un águila, se paró en frente de mí, estuvo 16 segundos viéndome. Elevó el vuelo y se fue”.
La también empresaria enfatizó que su experiencia la atestiguaron varias personas que estaban ahí, entre ellos un reconocido historiador, quien la guio en este encuentro. Según dijo, el experto le indicó que después de que el ave se postró frente a ella, tenía que sacar su “olín del amor” para que la acompañara ahora que el dios mexica le había otorgado su permiso.
De acuerdo con Méndez, el “olín” es un dije y cada quien porta uno. “El olín del amor es un símbolo que te mueve la vida, el movimiento. Y cuando te pones el símbolo, que también lo utiliza Jorge Flores, un vidente que es muy importante en el mundo, él lo trae desde hace 20 años aquí (en el pecho) y siempre mueve su vida para superarse”, aseguró la actriz.
Durante su narración mostró el “olín”, es decir, el dije que porta; sin embargo, no presentó el video que comprueba su encuentro con Quetzalcóatl, aunque afirmó que lo puede compartir en cualquier momento, y tampoco dijo cuál es el proyecto que comenzará tras la aprobación divina.
Esta no es la primera vez que Lucía comparte una experiencia paranormal, pues en mayo aseguró que habló con la fallecida Magda Rodríguez y la ayudó a que siguiera su camino a otro mundo, de la mano de la "angelóloga" Ariadna Tapia: “Logramos que ella entrara en esa ráfaga de luz, estaba terca”.