El Departamento de Policía de la ciudad de Auburn, Estados Unidos, informó que una madre halló drogas medicinales en la Cajita Feliz que había comprado para su hijo de 11 años en el autoservicio de un restaurante local de McDonald's, en el estado de Maine, por lo que acudió a las autoridades a denunciar el suceso.
Los hechos datan del 30 de junio cuando la madre compró el producto de McDonald's, que entre los nuggets y las papas fritas, se encontraban varios sobres de buprenorfina, un opioide que solo se expende con receta médica y se recomienda para tratar la adicción a otra drogas similares.
De acuerdo con la Policía, que informó del hecho en su cuenta de Facebook, el niño no se vio expuesto a ingerir el medicamento, ya que su madre acudió a las autoridades apenas descubrir los medicamentos, y de inmediato fue iniciada la investigación correspondiente.
Las autoridades revisaron las cámaras de seguridad del restaurante y concluyeron que el fármaco cayó del bolsillo de uno de los empleados del local cuando se inclinó para despachar la Cajita Feliz. Trascendió que el hombre obtuvo la buprenorfina de forma ilegal por medio de otra empleada el mismo día del incidente.
Ahora, los empleados involucrados, Michael Sevey, de 43 años, y Mariah Grant, de 29, son acusados por posesión ilícita y tráfico ilícito de medicamentos recetados, respectivamente.