Este jueves la Organización Meteorológica Mundial (OMM) informó que la Antártida registró una temperatura de 18,3 grados centígrados, superior al 2020, que fue el tercer año más caluroso de la historia, con una temperatura global promedio 1,2 grados centígrados por encima de los niveles previos a la Revolución Industrial.
Al respecto, el organismo refirió que formarán un comité especial para verificar si se trata de un nueva marca para el continente helado, para lo cual analizarán todos los datos que logren reunir. Aunque para Randal Cerveny, experto de la OMM sobre Clima y Extremos Climáticos, Randal Cerveny, asegura que "todo lo que hemos visto hasta ahora indica que probablemente se trata de un récord legítimo, pero por supuesto haremos una evaluación formal".
De acuerdo con un reporte de la Organización Meteorológica Mundial publicado en abril, el año 2020 fue el tercero más caluroso de la historia, con una temperatura global promedio de 1,2 grados centígrados. En el documento, el organismo afirma que la década de 2011-2020 superó todos los registros anteriores de temperatura.
Además, el informe no es optimista, pues advierte que las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera continuarán incrementando durante los próximos dos años.
Y eso no es todo, ya que refiere que durante 2020 el nivel del mar continuó elevándose, lo cual se ha acelerado incluso más en los meses recientes, debido a un mayor derretimiento de los glaciares groenlandeses y antárticos. Pero no solo es el deshielo, sino que los ecosistemas y la fauna marina continúan sufriendo las consecuencias negativas de la acidificación y desoxigenación del agua oceánica.
Aunado a ello, un estudio publicado en la revista Nature Geoscience en mayo, afirma que el deshielo en la Antártida puede generar con una reacción en cadena en los patrones climáticos.