El delantero charrúa Sebastián "Loco" Abreu, de 44 años, puso fin hoy viernes a su carrera como futbolista, en la cual vistió 31 camisetas de clubes y defendió los colores de la selección nacional de Uruguay en dos mundiales.
A fuerza de carisma y goles, Abreu dejó su huella en 12 países y en la historia de la selección uruguaya cuando en el Mundial de Sudáfrica 2010 le regaló a la Celeste el pase a las semifinales "picando" la pelota en la definición por penales ante Ghana.
Sobre aquel gol, que ubicó a Uruguay entre los cuatro mejores del mundo después de 40 años, Abreu alguna vez declaró que "la pelota se portó mal durante todo el Mundial, pero el día que necesitaba que se portara bien, me ayudó para que el grupo clasificara".
Multifacético, el "Loco" también se desempeñó como jugador-técnico, conductor de programas televisivos de entretenimiento, modelo publicitario y comentarista de fútbol.
Luego de jugar la tarde de este viernes sus últimos minutos como profesional con el modesto club Institución Atlética Sud América de la primera división del futbol uruguayo, que cayó 0-5 ante Liverpool, Abreu expresó su "felicidad por terminar la carrera de manera competitiva y en la cancha".
El "Loco" ingresó con su tradicional dorsal 13 desde el banco de suplentes, a los 75 minutos, cuando su equipo perdía 0-4 en el estadio Belvedere de Montevideo y no pudo despedirse marcando gol ante el primer club que enfrentó profesionalmente en su debut el 4 de junio de 1994, aquella vez defendiendo los colores del Defensor Sporting.
No obstante, en su historial deportivo sobran los goles pues marcó 404 en 805 partidos oficiales disputados.
Proveniente de su ciudad natal, Minas (120 kilómetros al este de Montevideo), comenzó su carrera en Defensor Sporting, para luego dar el salto internacional en 1996 en el San Lorenzo de Almagro de Argentina.
Pasó por clubes de 12 países, entre ellos el Deportivo La Coruña de España; el uruguayo Nacional de Montevideo, donde es una de las máximas figuras históricas, después de seis pasajes y con dos ligas conquistadas; Cruz Azul, América y Monterrey de México; también en Argentina defendió los colores del River Plate, y en Brasil alineó con el Botafogo y Gremio.
Ante la prensa, Abreu resaltó sus inicios en Minas como "lo más importante" de su carrera, ya que le permitió "poder llegar a todo eso" porque "hay un camino previo a la consolidación, que es lo que te genera felicidad", además, explicó que decidió jugar "un poco más" por "el registro de mis hijos, que me vieran jugar bien, de forma competitiva y ganando títulos".
Tiene cuatro hijos, uno de los cuales, Diego, de 17 años, sigue sus pasos como futbolista en Defensor Sporting y con convocatorias en selecciones juveniles mexicanas.
Respecto a su último club, el "Loco" afirmó que "'Sud América' me dio la posibilidad de jugar en Primera División, de competir y decir adiós en la manera que siempre quise: eligiendo el momento indicado y siendo uno el que toma la decisión".
"Me quedo con todo lo que estoy viviendo en estos días, los llamados de distintas partes del mundo de ex compañeros, entrenadores y periodistas. Eso es lo que más se cosecha porque la carrera habla por sí sola. Pero la parte humana es la que más se resalta", evaluó el delantero.
El espigado ex jugador, de 1.97 de estatura, señaló en una entrevista con la revista "Galería" del semanario "Búsqueda" que les pide a los jóvenes que "absorban la experiencia, yo les voy a absorber la juventud".
No obstante, el futuro profesional del exdelantero estará ligado a las canchas, pues él mismo sentenció que "se viene otra etapa que es la de entrenador".
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