Este jueves, finalmente un grupo de peritos particulares acudieron a la casa que rentaba Zyanya Figueroa Becerril para hacer una reconstrucción de los hechos que ocasionaron su muerte, pero esta vez con perspectiva de género y no descartando el feminicidio como línea de investigación.
A través de sus redes sociales, el Observatorio Ciudadano Nacional de Feminicidio informó que este día los servicios periciales privados contratados por la familia acudieron al inmueble que Zyanya Figueroa alquilaba, y en donde fue localizado su cuerpo en mayo del 2018.
En el lugar los peritos y expertos en la materia forense llevaron a cabo una reconstrucción de los hechos, a fin de integrar un expediente con los indicios localizados.
La diligencia ya se había intentado antes pero por diversos motivos no había sido posible realizarla; sin embargo, a unos días de la protesta, finalmente se logró concretar la reconstrucción de los hechos, que pretende determinar si en verdad se trató de un suicidio.
La familia sostiene que Zyanya Figueroa no se suicidó y que el resultado de las investigaciones de la Fiscalía General del Estado no se hicieron con perspectiva de género, por lo que exigen que la autoridad ministerial no le dé carpetazo a la investigación.
Apenas el pasado 21 de mayo los padres de Zyanya hicieron una manifestación en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado, donde el personal los agredió a ellos y a los activistas que los acompañaban, cuando exigían que se hiciera una nueva recolección de indicios antes de regresar el inmueble a su legítimo dueño.
