Estamos a poco más de dos semanas de que se lleven a cabo las elecciones del 6 de junio y las consecuencias del cochinero que se dio en MORENA en la elección de candidatos va camino a pasar factura en Puebla, al menos en la zona conurbada.
Amable lector, una fuente confiable cercana al partido vinotinto me comentó que hay mucha preocupación al interior de MORENA Puebla, pues todo indica que sus candidatos a diputaciones federales de la zona conurbada saldrán derrotados.
Es tal el problema en el que están estos candidatos, que no solo perderían la elección, sino que la derrota sería escandalosa y terminaría con la carrera política de muchos de ellos.
Mi “juditas” comentó que tienen en su poder unas encuestas en que los candidatos de la alianza “Va por México” llevan ventajas de hasta un 50 % en las preferencias electorales, incluso algunos están 20 puntos arriba de los candidatos morenistas.
De ser cierto lo que comenta esta fuente, entonces Ana Teresa Aranda, Mario Riestra, Xitlalic Ceja, Carolina Beauregard y Humberto Aguilar Coronado serán parte de la próxima legislatura federal.
La mala imagen que se ha creado MORENA con su proceso interno tendrá daños colaterales en candidatos como Sandra Ortiz, quien fue nominada por el Partido Verde, pero también carga con las siglas del partido vinotinto.
Parte fundamental de la eventual derrota para MORENA, me comentan, viene del escándalo protagonizado por Saúl Huerta, acusado de abuso sexual y que tuvo que renunciar a la candidatura por el Distrito 11.
Gracias a este caso, MORENA no solo entregó el distrito a Carolina Beauregard, sino que todos los candidatos de “Va por México” fueron vistos como mejor opción que los morenistas, manchados por el escándalo de Saúl Huerta.
Vienen tiempos muy complicados para MORENA antes, durante y después del 6 de junio, pues el voto que puede definir la contienda electoral, el del ciudadano de a pie y sin partido, parece que está perdido en la zona conurbada.
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