Los gatos son seres únicos. Su elegante manera de ser se complementa con momentos de locura en las que nuestras cortinas, sillones e incluso nuestros brazos terminan pagando consecuencias que al “michi” le parecen divertidas.
Aunque es importante el tiempo de juego para cualquier gato, hay momentos en que necesitamos calmar a este peludo y por supuesto la música es una herramienta para atenuar sus ánimos de “tierna destrucción”.
Cualquiera pensaría que un gato disfrutaría de música rock o incluso de heavy metal; sin embargo, esto resulta totalmente falso y si lo que buscas es poner en un estado de paz al “minino” no hay nada mejor que el sonido de los chelos, combinado con ronroneos y sonido de aves
Un estudio llevado a cabo por la Universidad de Luisiana analizó la respuesta de los felinos durante un examen veterinario en tres escenarios sonoros distintos: silencio, música clásica y, por último, música para gatos.
El estudio confirma que la música creada para gatos resulta más efectiva y útil en la importante tarea de reducir el estrés felino. Esta música contiene notas de chelos, algunos ronroneos y por supuesto, el sonido del canto de las aves.
De esta manera, puedes recurrir a música clásica que tenga gran contenido de chelos para que tu “michi” se relaje no solo en casa, sino en las temidas visitas al veterinario.
