Quienes se preguntan cuáles son las causas por las que Genoveva Huerta insiste en la colocación de “su planilla” de regidores y diputados locales deben voltear a ver el tablero completo que tiene preparado Fernando Manzanilla.
Es ya casi un lugar común escribir que el jefe de la dirigente estatal del PAN es el diputado federal del PES.
Pero lo que no es tan evidente es la verdadera razón por la que Manzanilla, a su vez, presiona a Huerta Villegas para incluir ciertos nombres en la planilla municipal o en las diputaciones locales.
Además de los ya sabidos aliados del dúo Fernando Manzanilla, en esta lista de posibles candidatos que pretende imponer Huerta Villegas destaca un nombre: Silvia Argüello.
Quien fuera candidata, en el pasado, de partidos como PRI o Nueva Alianza hoy es una más de las protegidas de Manzanilla Prieto.
El exsecretario de Gobernación pretende que Huerta Villegas la imponga o en el distrito 9 a la diputación local o en alguna de las regidurías de Puebla capital.
El cariño de Fernando Manzanilla hacia Silvia Argüello es enorme y nació desde que Argüello trabajó con Manzanilla en el gobierno interino.
Las responsabilidades de Argüello pasaron de ser políticas -buscaba a políticos para afiliarlos a la causa del funcionario- a más cercanas y confidenciales con el entonces secretario.
Testigos de esa devoción que inició entonces y hoy se mantiene con más vigor son los discretos meseros de un café bistro cercano a Casa Aguayo.
Silvia Argüello inició campaña con el Partido Encuentro Solidario desde el año pasado.
Apoyada por Fernando Manzanilla, comenzó su trabajo en el distrito local 9 y hoy incluso burla las disposiciones estatales y federales en cuanto al uso del COVID como plataforma electoral.
En efecto, Argüello está aprovechándose de la enfermedad para promoverse.
A través del reparto de cubrebocas, la aspirante a regidora (o a diputada) pretende posicionarse pese a que eso está prohibido.
Claro, confía en que Manzanilla Prieto le proteja.
O el PAN de Genoveva que es el de Fernando.
Como sea, lucra con la tragedia.