Aunque se creía que la recuperación económica en China tardaría por la pandemia del COVID-19, la película de animación “Jiang Ziya” demuestra que el país se está recuperando al convertirse en el filme con más recaudación durante su estreno.
Mientras la mayoría de los países mantienen cerradas las salas de cine hasta que disminuyan los contagios de coronavirus, China ha logrado mantener abiertos estos lugares para los amantes del séptimo arte, presentando películas que en algunos países tuvieron que retrasarse hasta un año.
Tal es el caso de “Jiang Ziya”, una producción originaria de China que ha cautivado a cientos de sus ciudadanos en el fin de semana de su estreno, a tal grado de que en dos días recaudó 100 millones de dólares, mientras que el día de su presentación, el pasado 1 de octubre, reunió 52,8 millones de dólares, lo que equivale aproximadamente a 9,000 entradas.
La película de animación 3D logró superar lo recaudado en 21 días por la versión live-action de Mulán, la apuesta de Disney para atraer a los espectadores, pero que no fue bien recibida por las muchas modificaciones que se le hicieron a la historia original.
“Jiang Ziya” forma parte del Universo Cinematográfico Fengshen, el cual proviene de las obras literarias creadas por la Dinastía Ming entre el siglo XVI y XVII, y en la que también se integra “Ne Zha”, la predecesora de la nueva película.
Ambas producciones muestran la caída de la Dinastía Shing y la toma de poder de los Zhang, acompañadas por elementos visuales de fantasía y culturales que forman parte de las creencias chinas.
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