La carrera por la presidencia municipal de Puebla capital ya comenzó. Prueba de ello es la publicación de encuestas respecto al posicionamiento de los aspirantes. En el caso de Morena y PAN, los aspirantes peso-pesados de la elección próxima, hay una diferencia de entre 13 y 16 puntos, según la medición de Campaigns and Elections Research, pero a la par los números del gobernador Miguel Barbosa y del presidente Andrés Manuel López Obrador han tenido un ligero incremento.
La elección de 2021 aún no está en la bolsa de nadie porque, aunque las tendencias de esta medición favorecen al PAN, aún faltan muchos meses para la elección, es decir, no hay una tendencia definida a 10 meses del proceso electoral. Escándalos públicos, operación en tierra, campañas mediáticas aún están por establecerse.
Para Morena, el secreto electoral aún está en la figura del presidente Andrés Manuel López Obrador, incluso a pesar de la pérdida de la popularidad de los últimos meses. En 2018, cuando las elecciones presidenciales, 491,310 poblanos sufragaron por el actual presidente causando una participación total del 65 % del listado nominal.
Según el tracking de Consulta Mitofsky, de noviembre de 2018 a febrero de 2019, López Obrador pasó de 61.6 % de aprobación a 67 %, es decir, incluso creció en sus primeros tres meses de gobierno. Hoy, según el mismo tracking, su aprobación es de 53.2 %.
Si se extrapolan estos porcentajes de aprobación al número de votos en Puebla se obtiene que López Obrador tendría hoy 424,313 simpatizantes al haber una aprobación de 53.2 %. Es decir, la caída de simpatías en el mandatario le ha impactado solo en 66,997 votos. Por eso el partido Morena sigue apareciendo alto en diversas encuestas en la capital.
Antonio Gali, el último candidato del PAN que ganó la alcaldía, obtuvo en 2013 un total de 254,546 votos. Es decir, casi la mitad de lo que obtuvo López Obrador en 2018. Así, aunque la elección del próximo año descienda en participación de 65 % a 42 % (el promedio de las intermedias), la ventaja de López Obrador se mantendría siempre y cuando los simpatizantes del mandatario salgan a sufragar.
Con un 65 % de participación el total de obradoristas en Puebla, tomando en cuenta 2018, son 421,310 poblanos. Si esta participación bajara a índices similares a 2013 en cuanto a participación, la base de López Obrador estaría entre los 380,000 y 410,000 votos, aún por encima de los 254,546 votos que tuvo Tony Gali en tiempos de la mesa alianza.
Para que los candidatos de Morena puedan alcanzar nuevamente una posición política deberán encontrar el voto lopezobradorista, que sigue fuerte en la capital a pesar del desgaste de ejercicio de poder en Puebla capital y el estado.
Casi de manera simultánea podría considerarse que la aprobación del gobernador Miguel Barbosa Huerta también está creciendo. Durante la pandemia de Covid-19, se elevó en 6.2 %, de acuerdo con una encuesta de México Elige, la semana pasada.
Datos de la organización afirman que el porcentaje de crecimiento del mandatario poblano es el más alto, junto con el de la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, que también tuvieron un alza del 6.2 por ciento en su aprobación.