Familiares y amigos de Gardenia Ortega Flores y Dulce Dayann Mora Ortega, madre e hija que fueron asesinadas y calcinadas en el municipio de Acajete el pasado fin de semana, acudieron hoy a su sepelio para darles el último adiós y exigir justicia.
Los féretros partieron alrededor de las 13:00 horas desde la casa de Gardenia y Dulce, donde los cuerpos fueron velados desde ayer por la tarde en medio de decenas de arreglos florales que llegaron como muestra de afecto por parte de los familiares y amigos de las víctimas.
Ahí se llevó a cabo una actividad conmemorativa según los usos de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, congregación religiosa a la cual madre e hija pertenecían desde el 2012, además se contó con la presencia de un mariachi para despedir a las víctimas.
Niñas que compartían actividades en la congregación Adventista con Dulce montaron una guardia de honor y escoltaron los féretros que fueron trasladados hasta el camposanto de la localidad de La Magdalena Tetela en donde se entonaron cánticos y se pidió por el descanso de las víctimas.
Don Delfin, padre y abuelo de las víctimas, aprovechó para agradecer a sus familiares y amigos el apoyo recibido desde el fin de semana cuando confirmaron que los cuerpos calcinados dentro de un automóvil eran los de su hija y su nieta. Del mismo modo, agradeció a los asistentes al sepelio, quienes soltaron globos al aire al tiempo que pidieron justicia.
Apenas hoy por la mañana el gobernador Miguel Barbosa Huerta aseguró que ya fue identificado el presunto feminicida, quien pertenecería al círculo cercano a las víctimas, por lo que se espera detenerlo pronto por parte de la Fiscalía General del Estado.
