El 47 por ciento de la población española (es decir, 22 millones de personas) vive en territorios que desde este lunes se encuentran en la llamada Fase 2 de desconfinamiento, que relaja las restricciones a la movilidad dictadas para luchar contra el covid-19, permitiendo más movilidad e incluso reiniciando tímidamente parte de la actividad educativa en algunas regiones.
"España inicia con pie firme la transición hacia la nueva normalidad", escribió el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en un mensaje difundido por redes sociales.
Con la llegada a Fase 2 se podrán reunir hasta grupos de quince personas y se permitirá hacer salidas para pasear o hacer ejercicio en cualquier franja horaria menos en las reservadas para personas mayores de 70 años.
Los bares, que en la Fase 1 solo podían atender en las terrazas, empezarán a ofrecer su servicio para mesas interiores siempre que no se supere el 40 por ciento del aforo.
En esta Fase 2 se permite a los ciudadanos disfrutar de una mayor cantidad de actividades de ocio gracias a la reapertura de reapertura de centros comerciales, cines, teatros o salas de conciertos, que también deberán aplicar restricciones de aforo.
Una de las principales novedades de esta fase es que se permite la reapertura de centros educativos, aunque de momento pocas regiones se sumaron a la vuelta a las aulas, muy desigual en los distintos territorios del país.
Por ejemplo, Galicia y País Vasco abrieron este lunes sus institutos para alumnos de los últimos cursos de secundaria, estudiantes de bachillerato y formación profesional, aunque los medios locales destacan que la asistencia a clase fue muy limitada.
Otra de las novedades de esta Fase 2 es la reapertura de playas y piscinas, aunque el Ministerio de Sanidad recomienda extremar las medidas de distanciamiento e higiene en ellas, sobre todo con el objetivo de evitar la interacción entre personas en las zonas de baño.
"En las playas, los riesgos asociados al covid-19 están relacionados con la interacción entre personas", señaló el Ministerio de Sanidad, subrayando que "no se dispone de información científica sobre la capacidad del virus para permanecer infeccioso en agua salada".