Normalmente, relacionamos el contacto físico con nuestros padres, pareja o con las personas más cercanas; sin embargo, hay personas que ni siquiera ese vínculo son capaces de tolerar. Los gestos cotidianos como un abrazo o un saludo de mano nos parecen indispensables y de lo más normales, siendo complicado imaginarnos nuestras vidas sin ellos.
Se estima que un 4% de la población entre los 18 y 65 años en México padecen algún tipo de fobia, mismas que generalmente comienzan en la niñez o adolescencia y permanecen hasta la vida adulta. Las fobias son un trastorno de salud emocional o sicológico, y una de las más complicadas es la afefobia, el miedo extremo a tocar o ser tocados por otra persona.
