
El 10 de mayo, es una de las festividades más celebradas, donde se reúnen las familias mexicanas para agasajar a las madres. En esta fecha es común que las calles y los restaurantes luzcan abarrotados, aunque este año las cosas tendrán que ser distintas.
Pero hay que ver el lado bueno de no poder salir. Por ejemplo, lo que íbamos a gastar en una comida fuera, que suele ser bastante, lo podemos invertir en un verdadero regalo para mamá.