
La población que ha podido y querido seguir la cuarentena de manera absoluta, se enfrenta a una necesidad que no se puede satisfacer con servicio a domicilio, y que al no ser cubierta causa molestia e inquietud: nos referimos al corte de cabello.
Conforme pasan los días de aislamiento el cabello crece, y aunque para algunos eso no es una molestia, hay muchos que se plantean si es o no una buena idea ir a la peluquería para quitarse este peso de encima, suponiendo que el establecimiento de nuestra preferencia esté abierto.