Ante los 2 millones 214 mil 861 casos confirmados de coronavirus en el mundo, el panorama de Latinoamérica no es alentador. Algunos países han reestructurado los planes de contingencia y a su vez reformado y reacondicionado centros de atención médica para los pacientes infectados de COVID-19. Para algunas otras naciones latinoamericanas garantizar la seguridad y la salud representa prácticamente un lujo que no todos los ciudadanos se pueden dar.
El segundo país con mayor cantidad de infectados en América es Brasil quien ya suma 30 mil 891 infectados, este país enfrenta la pandemia en medio de la polémica desatada con las declaraciones emitidas por el presidente de la nación, Jair Bolsonaro, quien ha tomado la decisión de dimitir del cargo al médico Luiz Henrique Mandetta, secretario de Salud perteneciente a su gabinete, la razón de su despido es una relación de trabajo mala y muy desgastada así como claras diferencias ideológicas existentes entre ambos.
Por otro lado, en Chile, país que ha registrado más de 9 mil casos confirmados, se entregarán Pasaportes COVID-19, con ellos se podrá acreditar la inmunidad ante el virus y comenzarán a ser entregados a partir del lunes 20 de abril. Esta medida tiene como objetivo brindar tranquilidad a sus ciudadanos y así comenzar a reactivar poco a poco la economía, aunque para determinar la existencia de la sanidad será necesario detectar la presencia de anticuerpos en la sangre (inmunoglobulina G) mediante una prueba.
De igual forma la República Colombiana quien tiene 3 mil 323 casos confirmados también se ha sumado a las iniciativas para ayudar a los sectores más vulnerables: María Fernanda Suárez, ministro de Minas y Energía, anunció a través de Twitter las medidas para las personas que se han visto afectadas por la crisis económica que ha generado la pandemia. "Las familias de estratos 3 o 4 que no puedan pagar el servicio de energía y gas, en los meses de abril y mayo, podrán diferir el pago en 24 meses" concluyó.
Mientras tanto en Ecuador, el presidente Lenin Moreno hizo un llamado al luto nacional por 15 días, pues tan sólo en la capital se concentra el 70% del total de los 8 mil 225 infectados y 403 muertos registrados dentro de sus fronteras. La realidad es que Ecuador enfrenta un grave problema de salud, el colapso del sistema de salud sumado al del sistema funerario; esto ha orillado a las personas a tomar decisiones drásticas con los cuerpos infectados, tales como cremarlos en la vía pública, lo que origina aún más contagios.
La pandemia de coronavirus ha hecho gran daño en los países latinoamericanos, ya que al ser una región en vías de desarrollo las consecuencias preparan un panorama adverso, pero la misma sociedad ha generado muestras de apoyo y solidaridad.