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La misma crisis sanitaria que ha llevado a la economía nacional a terapia intensiva ha fortalecido también las estrategias políticas de Andrés Manuel López Obrador y su partido, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena). Además del uso de los programas federales para el crecimiento de su base electoral, el presidente reveló su intención de llevar la revocación de mandato a los comicios del próximo año y con ello beneficiar a los candidatos de su partido.
En 2018, la aparición de López Obrador en la boleta electoral llevó a la victoria a candidatos a presidentes municipales, diputados, senadores y gobernadores. Tanto los analistas políticos que simpatizan con el partido marrón, y los que se oponen a este, coinciden en que fue “la ola” del tabasqueño la que causó la victoria de los aspirantes en las distintas demarcaciones electorales.
Este día, el mandatario federal dijo: “¿qué les ofrezco a los conservadores para que sea el pueblo de manera pacífica el que decida?, les ofrezco adelantar la fecha, que la revocación del mandato no sea hasta el (20)22, que la hagamos aprovechando ahora que van a ser las elecciones, el mismo día, una tarjeta adicional”.
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Tomando como punto de referencia las protestas a su estrategia para atender la crisis por la pandemia de COVID-19, López Obrador consideró que, si la oposición lo decide, este miércoles enviaría la iniciativa de reforma al artículo 35 constitucional para que los ciudadanos, además de elegir diputados federales, gobernadores, voten si él continúa como presidente o no.
La declaración de Andrés Manuel López Obrador luce correctamente calculada. Hace 15 días, domingo, el mandatario anunció una serie de acciones para enfrentar la pandemia. Sin embargo, solo se concentró en fortalecer los programas asistenciales que ya han sido criticados por voceros de la oposición política, debido a la integración de padrones clientelares que serían utilizados en la elección de 2021.
Más aún, si bien la aprobación de López Obrador ha caído, aún mantiene su estructura de apoyo y, tanto en algunas de las regiones del país como en Puebla, Morena es el partido puntero a derrotar en 2021.
Según una encuesta publicada por El Financiero, el partido marrón encabeza las preferencias electorales con 18 puntos. La encuesta del Centro de Estudios Consultivos, publicada por la revista Campaigns and Elections México, coincide con la tendencia en Puebla a favor de Morena.
El presidente fue aún más retador en la conferencia mañanera de este martes, pues dijo que esa modificación a la Constitución podría lograrse en la actual legislatura del Congreso de la Unión, porque su partido y aliados cuentan con mayoría legislativa, tanto en la Cámara de Diputados como de Senadores.
Las encuestas también coinciden en que el voto indeciso crece, pero no así el de los opositores. El PAN y el PRI siguen por debajo de Morena hasta en más de 10 puntos.
El consejero del Instituto Nacional Electoral, Ciro Murayama, defendió que el presidente no podría aparecer en la boleta a menos que se cambie la constitución. “La Constitución dice que la revocación de mandato sería al cuarto año de gobierno. No en elecciones intermedias: en 2021 el presidente no debe estar en campaña ni en la boleta electoral”.
La revocación de mandato fue aprobada por el Congreso de la Unión y 17 legislaturas locales para llevarse a cabo el 2022 tras una reforma a los artículos 35, 36, 41, 73, 81, 83, 99, 116 y 122 de la Constitución federal, a fin de que sean los ciudadanos los que decidan si un presidente, gobernador o un alcalde pueden continuar o no en el cargo, luego de la mitad del periodo para el que fueron electos.
No obstante, en las redes sociales se dio de inmediato un respaldo a esta decisión activado por los simpatizantes de López Obrador. Por la mañana, “Revocación de Mandato” se convirtió en tendencia y las cuentas de Twitter, reales y espejo de morenistas, promovieron la aparición del mandatario federal en la boleta electoral.
Así, junto con la imagen del presidente, los morenistas tendrán apoyos transformados en programas clientelares, los mismos que fueron aumentados con el pretexto de combatir la pandemia por el COVID-19.
