El brote de COVID-19 en Europa ofrece un panorama diverso, desacelerándose en algunos países como Italia y España y acelerándose en otros, indicó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Margaret Harris, portavoz de la OMS, dijo hoy en una conferencia de prensa en Ginebra que a nivel mundial, el 90 por ciento de los casos procede de Europa y Estados Unidos y "el pico aún no se ha alcanzado".
Al explicar el proceso de desarrollo de una vacuna, la cual requiere pruebas de seguridad con seres humanos, la portavoz de la OMS destacó que nadie podría dar ahora una fecha específica y que es probable que una vacuna no sea realista durante al menos 12 meses.
Cuando se le preguntó si Rusia vería una explosión de casos similar a Estados Unidos, Harris enfatizó que ningún país es igual a otro y que en gran parte las cosas dependen de los gobiernos y la población.
En China, señaló Harris, la mayor amenaza por el momento son los casos importados, los cuales representaban el 90 por ciento de los contagios identificados el día anterior.
En cuanto a las pruebas de anticuerpos hechas en algunos países, Harris señaló que esto puede confirmar si alguien se ha contagiado, pero no garantiza inmunidad ni protección del segundo contagio.
"En este etapa, ninguna de las pruebas con anticuerpos ha sido precalificada", añadió.