El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, sufre torturas y una auténtica intimidación, declaró este jueves la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova.
El pasado 7 de marzo, en la sesión plenaria del Consejo Permanente de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), la delegación rusa abordó el tema de la "continua represión política" de Assange, según la portavoz.
"Se puede hablar de torturas, de una auténtica intimidación, de una situación en la que se lleva a una persona concreta (Assange) al límite", dijo Zajárova en una rueda de prensa celebrada en formato de videoconferencia a causa del coronavirus.
La diplomática afirmó que se trata de un "crimen transmitido en vivo" que puede resultar en una muerte.
"En la sesión del Consejo Permanente Rusia señaló que es inaceptable privar al periodista de la oportunidad de recibir atención médica adecuada, lo que simplemente le puede costar la vida, y comunicar libremente con sus abogados", indicó Zajárova.
Sin embargo, el Reino Unido y Estados Unidos tienen otra opinión al respecto, expresó la portavoz.
"Según su opinión, el caso de Assange no tiene nada que ver con la libertad de expresión o la libertad de prensa", dijo la diplomática.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos reclama a Assange por un supuesto delito de "conspiración para cometer intrusión informática" y diecisiete cargos por acceder, obtener y divulgar documentos secretos, militares y diplomáticos, entre 2010 y 2011.
Las imputaciones están relacionadas con los papeles de las guerras de Irak y Afganistán, los presos de Guantánamo y los cables diplomáticos difundidos por WikiLeaks en cooperación con medios establecidos internacionales, desde el británico The Guardian al español El País, el alemán Der Spiegel o The New York Times.
Es la primera vez que la ley de espionaje, que data de 1917, se emplea contra un editor o un medio de comunicación, según el entorno de la plataforma de filtraciones.
Los cargos imputados contra Assange se penalizan en su conjunto con 175 años en prisión.
Assange se encontraba refugiado desde 2012 en la embajada de Ecuador en Londres.
El Gobierno de Lenín Moreno le retiró el asilo el pasado 11 de abril y la policía británica detuvo al periodista ese mismo día por haber violado las condiciones de libertad condicional en 2012.
Assange lleva casi un año en la prisión de máxima seguridad de Belmarsh en Londres.
La abogada del equipo de defensa del ciberactivista, Renata Ávila, comunicó a Sputnik el pasado 28 de enero que la salud del fundador de Wikileaks está empeorando.