El brote del nuevo coronavirus tendrá un impacto negativo a largo plazo sobre las empresas de tecnología cuya producción depende de China, estimó la calificadora de riesgos Fitch Ratings.
"El brote del coronavirus puede tener un impacto a largo plazo en las empresas de tecnología, dado que las cadenas de suministro dependen de China (...) y los proveedores chinos aún no están trabajando a plena capacidad", advirtió la agencia.
Fitch Ratings señala que si la producción se estabiliza en las próximas una o dos semanas, el impacto negativo será temporal, pero si esta situación dura hasta marzo o abril, las interrupciones en el trabajo tendrán un impacto devastador en el sector tecnológico.
Según la agencia, el cierre temporal de las plantas de Foxconn podría poner en peligro las operaciones de Apple en el primer semestre de 2020.
La propagación del coronavirus también amenaza al negocio de Intel, HP y Dell, advirtió.
El nuevo coronavirus COVID-19, detectado en la ciudad china de Wuhan a finales del año pasado, provocó 1.875 muertes hasta la fecha, incluidas cinco fuera de la China continental, e infectó a más de 73.000 personas en más de 25 países, aunque el 99% de estos casos corresponden a China.