Las autoridades de la provincia de Batangas, en la isla filipina de Luzón, declararon un estado de calamidad ante una inminente erupción del volcán Taal, situado a varias decenas de kilómetros de la capital nacional, Manila.
La Mesa Provincial de Batangas aprobó una resolución declarando el "estado de calamidad en la provincia", informó este lunes el canal CNN Philippines.
La medida permitirá a las autoridades hacer uso de los fondos de emergencia para ayudar a los damnificados por la nueva fase de inestabilidad volcánica.
El secretario de Defensa filipino, Delfin Lorenzana, quien preside el Consejo Nacional de Reducción y Gestión de Riesgos (NRRMC), estimó en más de 10.700 el número de las personas que podrían verse afectadas por la erupción del Taal. La mayoría son residentes de Batangas.
El volcán Taal, situado a varias decenas de kilómetros de Manila, volvió a despertarse el 12 de enero, lanzó una columna de vapor y material piroclástico de entre 10 y 15 kilómetros, así como cenizas que cayeron no solo en la zona aledaña sino también en áreas más apartadas, como la ciudad Quezón.
Se encuentra en una isla en el lago Taal, dentro de una caldera resultante de una erupción antigua que luego se inundó. En las costas del lago hay varias localidades, en las que se decretó una evacuación parcial el domingo.
Desde 1572, el Taal experimentó más de treinta erupciones que causaron miles de muertos.
El Instituto de Vulcanología y Sismología de Filipinas (Phivolcs) fue elevando gradualmente la alerta al nivel 4 el domingo y advirtió sobre una inminente erupción explosiva y peligrosa, e incluso un tsunami volcánico, en las próximas horas o días.