Miles de independentistas catalanes iniciaron una multitudinaria protesta en el exterior del estadio Camp Nou de Barcelona, a pocas horas del mediático partido de fútbol que enfrentará al FC Barcelona y al Real Madrid.
"Hemos venido para dar apoyo a las acciones de demanda de un diálogo político sobre la situación en Cataluña" dijo a Sputnik uno de los manifestantes que se unieron a la protesta, Albert Rodríguez.
A partir de las 16:00 (hora local), grupos de manifestantes comenzaron a concentrarse frente a los distintos accesos al estadio, donde voluntarios repartían más de 100.000 pequeñas pancartas con el lema "Spain Sit and Talk" (España siéntate y habla), convertido en eslogan del movimiento independentista.
Se trata de una nueva movilización organizada por el Tsunami Democrático, el movimiento de protesta que pretende aprovechar el "clásico" entre el Barça y el Madrid para exponer al mundo las demandas independentistas.
Algunos de los concentrados acudieron con banderas independentistas y pintaron mensajes reivindicativos en el suelo, mientras que otros jugaron con pelotas que evocaban a las balas de goma utilizadas por los agentes antidisturbios contra manifestantes.
Con el objetivo de visibilizar el conflicto en Cataluña se ha convocado también una protesta en el interior del estadio, que incluirá pelotas hinchables y una pancarta, aunque los organizadores no desvelaron más detalles.
Para llevar a cabo esta acción, es "imprescindible que el partido se pueda disputar y la afición con entrada y carnet pueda acceder al estadio" y que la protesta discurra "sin violencia", indicó el Tsunami Democrático a través de las redes sociales.
"Tenemos la información que va difundiendo el Tsunami Democrático, tenemos nuestros carteles y estamos esperando, no sabemos nada más pero nos han asegurado que podremos ver el partido en directo", dijo Rodríguez sobre la secreta convocatoria.
Para garantizar el libre acceso al estadio y la seguridad en los alrededores, el Gobierno catalán y el FC Barcelona desplegaron un dispositivo de 3.000 agentes, entre seguridad privada y efectivos de los Mossos d'Esquadra, la policía catalana.
Antes de comenzar el evento deportivo, todas las líneas de metro funcionaban con normalidad y las personas podían acceder a las puertas del recinto, donde la policía efectuó registros para vigilar la entrada de objetos.
El partido entre el Barça y el Madrid se jugará a partir de las 20:00 de este 18 de diciembre tras ser aplazado por las autoridades del fútbol en España a causa de las protestas en Cataluña por la sentencia contra líderes y políticos independentistas.
El Tsunami Democrático coordinó anteriormente movilizaciones masivas como la ocupación del aeropuerto de Barcelona o los cortes de carreteras en la frontera con Francia.